http://absencito.blogspot.com/2012/01/m ... ca-de.html
Yo creo que sí es rentable distribuir contenidos legalmente en la red: al fin y al cabo, hablamos de una cantidad enorme de obras que ya están explotadas por otros medios. Es decir, poner un catálogo de películas a disposición de quien las quiera ver, pagando una cierta cantidad, supondrá añadir un nuevo canal de explotación de estas obras. Y lo mismo con las series: si me pudiera bajar legalmente los capítulos (o verlos en streaming, mejor) de las series americanas e inglesas con la misma rapidez que puedo conseguirlas con el bittorrent, pagaría encantado. Y me evitaba algún que otro susto en forma de virus.Nihil escribió:Primero lo que hacen las empresas ilegales de descarga es mucho dinero cuando el negocio es de cinco tipos que sólo realizan una inversión mínima porque el trabajo lo hace otro, pero vamos no es tanto dinero si el negocio es legal, eso es evidente, no cuesta lo mismo hacer una película que colgar un link.
Pero por otra parte si que es cierto que hay compromisos intermedios, por ejemplo, Netfix está intentando intorducirse en el mercado español pero de momento sin ningún éxito porque sólo el pago de derechos lo hace inviable, estos pobres idiotas que mantienen los derechos no se dan cuenta que reduciendo sus pretensiones harían que esto fuera un negocio redondo para todo el mundo. A esta gente le martilleará la piratería hasta que entren por el aro, así es la vidapero al final todo irá encontrando su cauce y si no al tiempo.
Yo descargo bastante. Y ahora que tengo un odioso excedente de tiempo libre, más aún. Al fin y al cabo, obtengo un bien gratis (o con un coste fijo: la conexión a internet) y hasta la fecha no he visto a nadie quejarse cuando consigue algo gratis. Pero que lo haga no quiere decir que me parezca justo: cuando encuentren la forma de impedirlo, me parecerá lógico y normal que lo hagan. Al fin y al cabo, nadie está obligado a entretenerme gratis, y no seré yo el que des-precie el trabajo ajeno, con todo lo que me jodería que infravalorasen el mío.
