- Audiolibro.
- epub (hasta cap. 7)
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¡Hola a todos! Con este AAR de Stellaris que también he subido al foro paradoxiano, me estreno en este foro. Llevo tiempo siguiendo vuestros podcast en ivoox y ahora ya formo parte de esta comunidad, aportando mi pequeño granito de arena...por cierto, me encantan los juegos de estrategia/4x/militar, tanto históricos como espaciales. Suelo ser "jugador de un solo juego" y ahora mismo estoy "dedicado" a Stellaris (aunque en rollo 4x espacial también he jugado últimamente al nuevo MOO, Polaris Sector y Endless Space, así como a los ya casi seminales Aurora y Distant Worlds Universe).
Sin más, mi AAR, espero que os guste. Si hay interés, tiraré para adelante con él...
INFORMACIÓN PREVIA
Juego muy modeado con más rasgos de especie, más personalidades de la IA y tradiciones adicionales, nuevos eventos, armas, edificios y tecnologías de mods cómo Zenith of Fallen Empires, LEX, A relic of a Fallen Empire y Fallen empires Expanded para dar más variedad a la historia. Y aumentar la dificultad de la partida, incluidas las crisis. De hecho, los leviathanes también están buffeados con Stronger Guardians. Las naves iniciales son de Elves of Stellaris y los retratos de los ángeles de Animated Zeriphen. Algunos de estos mods están directamente traducidos por mí mismo (por cierto, os recomiendo probarlos y si encontráis errores, que me los hagáis saber para mejorar la traducción). También tengo el pack de SRN.
Configuración de juego
Galaxia anillo, 400 estrellas, 25% de planetas habitables, max 10 imperios caídos, 10 especies de IA todas con inicio avanzado, dificultad alta, agresividad alta. La idea es que no sea muy grande para que haya bastante “movimiento” y avance rápido la partida. Además facilita no tener demasiado lag en un late-gate previsiblemente muy movido.
- Raza Principal: Kustodi0s.
Antiguas abominaciones con baja habitabilidad y con un tiempo de desarrollo de -60%, lo que evidentemente limitará mucho el crecimiento de su población. Ciudadanos libres de un imperio oligárquico, autoritario y espiritualista, con esclavitud y purga permitidas para otras especies (excepto para los humanos, que no pueden ser purgados).
- Raza sincrética: humanos.
Esclavitud tradicional. Dentro del roleplay de esta campaña, tendentes a éticas opuestas al imperio: materialismo e igualitarismo, principalmente. Podrán ser modificados genéricamente.
Ideas Previas
Evidentemente el propio desarrollo del juego dictará aleatoriamente el futuro de la partida, pero mi idea inicial con los Kustodi0s es controlar un territorio importante, crecer mediante la construcción de hábitats dada la escasez de planetas, hacerme un imperio fuerte militarmente, buscar la ascensión psiónica y el Shroud, dominar las armas de Titán y convertirme en un imperio Ascendido para luchar en una posible Última Cruzada (siguiendo la línea de Zenith). Seguir el camino espiritualista y de la esclavitud de otras especies, incluso emplearlas como ganado. Luchar contra leviatanes - incluidos los magníficos guardianes de LEX - como forma de probar nuestro poder y ofrecer sacrificios a su Di0s... e incluso llegar a forzar la crisis final de Los Heraldos.
Con los humanos, la idea sería dejar crecer mucho sus poblaciones, reprimirlos y no controlar demasiado sus éticas, confiando en que un día puedan llegar a descubrir el secreto de su especie, rebelarse y cambiar el destino del imperio y de la galaxia...o no, y vivir esclavizados para siempre bajo el yugo de sus Custodios pseudocyborg.
Suelo jugar con imperios democráticos y materialistas, igualitaristas, jamás hago purgas., por lo que será un juego diferente para mí.
El Cer0 - Prólogo
Leyenda humana popular, trasmitida oralmente. Cientos de humanos murieron para poder transmitirla hasta nuestros días, escapando a la censura Kustodia.
Cuando despertamos, ellos ya estaban aquí. De hecho, fueron ellos mismos quienes nos despertaron. Una especie de “ángeles mecánicos” de más de 3 metros de altura a los que conocíamos como Kustodi0s. Nos obligaban a trabajar para ellos en sus granjas y minas en unas condiciones deplorables, en aquel paradisíaco planeta Gaia en el que jamás nos sentimos cómo en nuestro hogar...aunque estuviésemos inexorablemente (y genéticamente) “encadenados” a él. Ellos lo llamaban La Catedral. Para nosotros era el purgatorio.
Más tarde, supimos que su ubicación en aquel sistema estelar era misteriosamente anómala y que, en realidad, no se había formado de manera natural allí, como el resto de planetas y asteroides existentes. Los datos de los sondeos que nuestros espías conseguían robarles a nuestros captores indicaban que solo quedaban planetas destruidos, testigos de misteriosos acontecimientos de un pasado que aún desconocíamos. De todos ellos, uno nos llamaba especialmente la atención. Se conocía como Tierra Destruida, y su superficie presentaba ciudades en ruinas, mientras que su órbita conservaba innumerable restos de un combate espacial que parecía haber acabado por destruir su única luna y la habitabilidad del propio planeta.
Aun podían observarse estas luces violetas características de los edificios Kustodi0s, por lo que algunos humanos creíamos que los Kustodi0s provenían de allí. Pero eran todo suposiciones. La Catedral era, por tanto, el único lugar en el que podíamos vivir del universo conocido.
Se nos prohibía leer y escribir, no se nos permitía acercarnos a sus laboratorios, ni entrar en los templos y monumentos religiosos que los fanáticos Kustodi0s levantaban en honor al N0-Di0s, una entidad divina que negaba su propia existencia y la de toda la galaxia en forma de anillo de la que formábamos parte, y cuya forma anular parecía guardar relación directa con este culto. Una religión que predicaba el odio a sí mismo como redención de los pecados. La mayoría pensábamos que era una mera falacia bajo la que justificaban su explotación y sus actos de represión y agresión hacia nosotros, mientras ellos vivían en preciosas y modernas ciudades con todas las comodidades. Sin embargo, había algunos de los nuestros que creían en esa patraña: ¡viles traidores, pobres ovejas sin voluntad! No merecen más suerte que la de los animales que procesamos como alimento para los Kustodi0s en sus granjas-complejo, pero también merecen ser liberados, ya que hay gente más susceptible que otra a sus campañas de adoctrinamiento y todos merecemos ser tratados con equidad. Nos veían como animales inferiores, solo servíamos para trabajos no especializados y nuestro potencial intelectual y como líderes había sido totalmente reprimido. Suprimido. Pero si fuera así, no seríamos racionales ni conscientes de lo injusto de nuestra situación. No estaríamos deseando apropiarnos de sus magníficas naves, cuyo diseño recordaba a las propias alas de estos ángeles malditos...¡pronto llegaría nuestro momento!
Estas abominaciones, terroríficos ángeles de la guarda robóticos, nos causaban una sensación de profunda tristeza con su sola presencia. No solo nuestros hijos tenían pesadillas por las noches...mientras dormíamos todos juntos hacinados en sus campos de trabajo. Jamás les vimos su cara. Si es que en realidad tenían una, escondida bajo aquellas "máscaras" formadas por campos de fuerza impenetrables. Parecían máquinas pero odiaban a las máquinas. Nos odiaban a nosotros. Odiaban a todo el mundo. Solo amaban a su Di0s. Pero eso era antes de que comenzásemos a luchar por nuestra libertad...antes de descubrir su oscuro secreto.
Capítulo 1: Génesis y primer encuentro.
En los primeros años, el Imperio comienza a descubrir su propio sistema y los sistemas estelares cercanos con sus dos naves científicas. Esa fue la primera orden del N0-Di0s: Conoced mi cíclica 0bra ¡Multiplicaos!
Aunque sabíamos que nos había puesto a prueba una vez más, en su Infinita Sabiduría, limitando nuestra capacidad reproductiva. No sería el único acto de Fe que nos exigiese. Atándonos a estos primitivos y estúpidos monos orgánicos, que solo sirven para recolectar y trabajar en las minas. En un planeta paradisíaco ideal para esos animales subdesarrollados, pero al que nosotros sentíamos que no pertenecíamos. ¡Herejes afortunados, su idiotez simplifica su cumplimiento de la Palabra del N0-Di0s!. Ni siquiera podemos alimentarnos con ellos, que es para lo que mejor podrían servir. Los caminos del Señor son inescrutables. Y nosotros siempre seguiremos Su dirección, como indican la Flecha y las Alas de nuestro escudo imperial. Aceptamos su Voluntad sin reservas.
Poco a poco, comenzamos también a organizar nuestro planeta. Nuestra producción mineral es muy baja y aún no tenemos potencial para poder mantener una flota demasiado importante.¡Tendremos que aumentar la potencia de nuestros látigos eléctricos, vagos humanos!
Por otra parte, no nos hemos encontrado demasiados enemigos, excepto un extraño dron minero en el llamado cinturón de Kuiper, dentro de nuestro propio sistema. Aunque lo aniquilamos rápidamente, constituye una prueba más de lo perjudicial de La Máquina. Jamás dejaremos que tengan voluntad propia, ¡Pecad0!. Tampoco debe ensuciarse la 0bra del Señ0r modificando genéticamente nuestra especie.
Pero todo iba a cambiar muy pronto. Aún no habíamos conseguido construir ni siquiera nuestra primera estación espacial minera, cuando nos encontramos con el primer demonio. Unos repugnantes insectos parásitos de vivos colores que vivían en una especie de enjambre, formando parte de una mente colmena colectiva, y que se hacían llamar Crisálida Orucchia.
Sin voluntad propia ni creencia alguna, no presentaban demasiado interés como fieles del N0-Di0s, más allá de que tenían pinta de tener buen sabor. Quiso el Señ0r que también fuesen auténticos genios científicos, por lo que seguro que sus cerebros bien cocinados podían servir para mejorar nuestra capacidad intelectual.
Por el contrario Tchaa'pol-Kolse, el sistema que habían infectado y al que llamaban hogar, nos dejó totalmente embelesados. Un maravilloso mundo en forma de anillo, hecho a imagen y semejanza del N0-Di0s... y que sus sucias y sacrílegas patitas de oruga estaban ensuciando con su herejía colectiva. En el mismo momento en el que nos insultaron, cerrándonos sus fronteras, nuestro actual líder el Sumo Sacerdote y Kustodi0 Superior Ansiel tuvo una Visi0n presciente: el N0-Di0s nos había concedido el regalo de un nuevo lugar dónde honrar su Palabra, un primer demonio que derrotar para probarle nuestra fé.
Así fue como decidimos comenzar a prepararnos para nuestra primera jihad, nuestra primera guerra santa. ¡Alabado sea el N0-Di0s!
(Continuará...)
Edito: hay una errata en la frase de portada, pero ya me da pereza cambiarla, lo siento.
