Bueno, y el k kedaba:
Louis Nicolas Davout, Duque de Auerstadt, Principe de Eckmuhl.
Nacido en Annoux del departamento de Yonne, de una vieja familia militar noble pero pobre. Entró en la escuela militar en 1784 y ascendido en 1788 a Subteniente entró formalmente en el Ejercito Francés. Se le comisionó un batallón de Caballería en 1789. Pero al estallar la Revolución Francesa, fue expulsado del Ejercito por insubordinación pero Davout había abrazado los ideales revolucionarios y fue rápidamente reinsertado. Comandó un Batallón de Voluntarios en 1792 y se distinguió en la Batalla de Neerwinden la primavera siguiente. Inmediatamente por éste hecho fue ascendido a Coronel. En 1794, justo despues de haber sido ascendido a General de Brigada, fue retirado por su ascendencia noble.
Pero debido a su gran capacidad, se le restituyo el rango y participó en todas las campañas desde 1794 a 1797 en el Rin. Por sus logros, fue enviado a estar junto con Desaix en la campaña de Egipto; donde llamó mucho la atención de Napoleon Bonaparte, quien se lo "trajo" consigo en su regreso. Participó maravillosamente en la Batalla de Marengo y Bonaparte, confiando plenamente en su capacidad lo ascendió a General de División. Entregándole en 1801, un mando en la Guardia Consular. Por consiguiente, cuando Napoleon se proclamó Emperador de los Franceses, fue uno de los primeros Generales en ser nombrado Mariscal de Francia.
Como Comandante del III Corps de la Grande Armée, Davout brindó las mejores demostraciones de la capacidad de esta maquina de guerra, además que siempre probó su excelencia en el campo de batalla. Demás está decir que participó en las mayores campañas de la Grande Armée. Durante la batalla de Austerlitz, el III Corps redujo la fuerza de los ataques de los Aliados. En la campaña de Jena, Davout destrozó al principal ejercito Prusiano, comandado el Duque de Brunswick pero contando con el apoyo de la caballería del propio Blücher; usando sólo su III Corps compuesto por alrededor de 27000 soldados, desmanteló al ejercito Prusiano que contaba con mas de 60000 hombres; una Brillante Batalla.
Participó tambien en Eylau y Friedland. Fue nombrado Gobernador-General del Gran Ducado de Varsovia cuando el Tratado de Tilsit puso fin a la guerra, en el cuál se distinguió como organizador, supervisando personalmente la creación administrativa y organizacional del Estado. Un año despues, Bonaparte lo nombra Duque de Auerstadt. En 1809, participa en las acciones que culminaron con la Batalla de Eckmuhl, en la cuál salió victorioso nuevamente y una vez mas, distinguiendose con una victoria firme. Por ello fue nombrado Principe de Eckmuhl por el Emperador.
Luego Napoleon I le encomendó una tarea que sería fundamental, gestionar y administrar la creación de los "Cuerpos de Observación del Elba", lo cual era en realidad la Gigantesca Grande Armée que usó Bonaparte para invadir al Imperio Zarista en 1812. En este ejercito, Davout comando el I Corps, un grupo de 70000 soldados. Este Corp solo derrotó a los Rusos en Mohilev antes de unirse al resto del ejercito en su avance a la vieja capital Rusa. Por supuesto, siguió al Ejercito en su desastrosa retirada de Moscú.
En 1813, con el Imperio Napoleónico en retroceso, a Davout se le dió la orden de comandar el distrito militar de Hamburgo. Esta ciudad, con pobres murallas y defensas, sería la casa de Davout por un largo año. Defendiendo heroicamente, con pobres suministros y nada de refuerzos, resistió los embates de Prusianos, Sajones e Ingleses. Solo cedería la ciudad debido a la orden directa del Rey Luis XVIII luego de la Primera Abdicación de Napoleon I.
Despues de éste hecho, se retiro del mundo militar, aunque despotricando cuanto podía de los Borbones. Por ello, cuando Napoleon regresó de Elba, se unió a él rápidamente. Nombrado Ministro de Guerra del Imperio. Reorganizó, cuanto pudo, al ejercito francés; y era tan indispensable para el Ministerio que Napoleon I lo dejó en Paris durante la campaña de Waterloo. Mucho se habla de que hubiese pasado si el genio de Davout hubiese sido utilizado en la decisiva batalla. Y mucho criticismo a Bonaparte tambien ha habido por decidir dejar "en casa" a su mejor general por mucho.
Pero por otro lado, Davout comandó firme y elegantemente la defensa de Paris de los Aliados. Aunque sin esperanza, el tiempo y el desgaste que ocasionó a los extranjeros, permitieron que Francia tuviese mejor posición en las negociaciones. A pesar de ésta excelente labor, se le fue retirado del ejercito y se desposeyó de los rangos militares que poseía, a la Segunda Restauración. Cuando sus generales subordinados fueron proscritos, él intentó que los cargos recayesen en él tanto que él fue que dió las ordenes; además que intentó evitar el fusilamiento de Ney.
Luego que la enemistad que los Borbones tenían con él se fue disipando, se reconcilió con la Monarquia y sus rangos le fueron regresados en 1817 y en 1819 entró en la Camara de los Pares. Fue elegido alcalde de Savigny-sur-Orge de 1822 hasta su muerte en 1823. Su hijo, Louis-Napoleon, le sucedió en el cargo d 1843 a 1846. Aún todavía se conserva una plaza con el nombre de Louis Nicolas Davout en la ciudad, asi como un boulevar en Paris.
De todos los Mariscales de Francia, Davout tenía el mas férreo caracter. Era obedecido por todos sus subalternos (incluido VanDamme), pero era mas respetado que amado. De estatura media, robusto, de facciones severas y prematuramente calvo. Era muy corto de vista, en batalla usaba lentes que se aseguraban detras de su cabeza para que no se le cayeran. Frio, metódico, incorruptible, tranquilo, y con una agil y abierta mente. Un Organizador experto como se pudo comprobar en el Gran Ducado de Varsovia. Sus tropas siempre fueron las mejor entrenadas, equipadas y disciplinadas de la Grande Armée. Usualmente se le asignaban las tareas mas dificiles. Estricto con sus oficiales, pero siempre recordaba y recompensaba el buen trabajo; y se tomaba la responsabilidad de los errores de sus subalternos cuando éstos habían seguido sus ordenes. Tenía una habilidad para la inteligencia militar. Aunque era duro en su trato con los civiles cuando era necesario alimentar a sus tropas, no permitió nunca los saqueos. Excelente táctico y estratega, se puede resumir todo en esto: Nunca perdió una batalla.
Los soldados lo llamaban Le Just (El Justo), aunque era mas conocido por su apodo de Mariscal de Hierro.[/img]