Turno 24: El billar diplomático
Este turno es bastante tranquilo, tienen lugar un par de eventos (uno bueno, caen gemas del aire y otro malo, aumenta un poco el nivel de revuelta en una provincia, nada grave).
Dos de mis magos han lanzado convocaciones y 2 Dragones de las Cuevas se suman a mis fuerzas.
Realmente no son dragones, sino lagartos gigantescos. Los Dragones de verdad cuestan más convocarlos y se requiere un nivel mágico muy superior. Lo bueno de estos bichos es que a pesar de su baja defensa tienen la piel dura y una protección muy elevada: 22.
Un aspecto negativo de estos lagartos-dragón es que son de sangre fría:
Esto hace que se cansen mucho cuando combaten en provincias frías (o sea, que en mis provincias con un fuerte dominio de mi Fe estos Dragones se cansarían muchísimo, mientras que en las provincias de Abysia serían más útiles).
En el turno pasado convoqué 20 lobos, veamos su ficha.
Su principal baza es la velocidad, son muy rápidos y tienen bastante fuerza pero su protección es escasa, cualquier cosa les hace daño y su piel no es como la del Dragón. Son Furtivos así que podría mover este ejército con un líder también furtivo y adentrarme en territorio enemigo.
Estos son los hechizos rituales que me permiten convocar seres mágicos y no tan mágicos. Es el “menú” de lo que pueden convocar mis principales chamanes.
Arriba podéis ver el stock que tengo de gemas, bastante surtido en Astral, Tierra y Naturaleza.
Cuando estaba haciendo el parte intercambio un par de e-mails con C’tis porque el turno revela que no ha atacado. Es más, se ha retirado hacia el oeste. ¿Qué está pasando? Pues este mail del francés confirma lo peor.
Kailasa le ha declarado la guerra y el francés ha desviado todas sus fuerzas hacia el oeste, con el Titán y todo lo que tiene. Renuncia al frente este y me deja sólo ante Abysia. El peor escenario posible hecho realidad, mis intentos anteriores de animar a Arco a unírseme fueron correctos y la mejor opción visto el panorama. El tiempo y las circunstancias me han dado la razón. El problema es que Arco responda a mis peticiones pero no hay respuesta alguna…
Visto fríamente parece que Arco guarda silencio porque seguramente está aliada con Yomi y no sería correcto meterse en un berenjenal (ayudarme a mí y a C’tis mientras su aliada, Kailasa, también ataca a C’tis). Demasiado complicado y peligroso para Arco, que tiene que guardar las formas ante su Señor, el Dios de Kailasa. Pero no me cabe duda que cuando la cosa pinte mal para C’tis, Arco se abalanzará sobre los restos de la frontera norte de la nación lagarto como un buitre rapiñando lo que quede.
Con Kailasa en plan “
cuernos y a la carga”, C’tis que será historia en breve y con Arco ignorándome, sólo quedamos yo y Abysia, ambos dándonos de leches como tontos y desangrándonos mientras por el oeste se acercan las huestes de Mordor y el Señor Oscuro (y el buitre de Arco observando todo con detenimiento para ver qué puede pescar). La madre que los parió a todos.
Vista esta desbandada, sólo me quedan dos armas. Por un lado envío un mensaje a Agartha (la nación que parece dominar la partida) animándole a que haga una alianza con C’tis para disuadir a Kailasa, pero el jugador de Agartha me dice que “
psee, que no, que no y que pasa”. En el mail le digo que Kailasa hará frontera con él en breve y que sólo les separará el río; que Kailasa es la 2º potencia de la partida después de él (Agartha) y que su poderoso ejército no es motivo de risa; que no puede esconderse o se encontrará con Kailasa haciéndole la puñeta. Pero el jugador de Agartha sólo quiere comerciar y va a lo suyo. Lleva un porrón de turnos poniendo anuncios en el foro de que comercia con tal, que forja lo otro a cambio de pascual, etc, etc. Este va a su rollo y no parece un jugador muy agresivo, más bien diplomático y poco dado a las guerras. Le va el rollo Patrician III.
Así que gasto mi última bala. Le envío un mensaje al jugador de Abysia y le ofrezco un trato ante la amenaza que viene del oeste: un NAP+3, colaborar juntos para ser más fuertes y dejar de desangrarnos. El mail intenta ser convincente en explicar que la guerra no nos puede llevar más que a desgastarnos y que Kailasa es el peligro. Que yo tengo cosas que él no tiene y que juntos podemos ser más fuertes. Que puedo forjar objetos baratos y que nos conviene estar unidos para enfrentarnos al peligro que se avecina y no meternos entre nosotros.
Veremos qué ocurre y si se digna a contestar.
Una imagen de Bulbar, a petición de algunos jugadores.
Gráficas, en todas soy el último. Abysia se ha visto lastrada también por la guerra que tenemos.
Y así queda la cosa. A ver qué dice Abysia y si se aviene a detener esta guerra. Saldríamos ganando, ambos recuperaríamos nuestra economía y yo le puedo dar lo que su economía muy centrada en el Fuego no le puede generar. Falta que él se avenga y vea también la amenaza de la misma manera, cosa que dudo. Mi mail puede ser interpretado como una bajada de pantalones pero es que Arco y Kailasa no van a dejarnos respirar. Si es capaz de percatarse de ello…y Abysia no va a poder detener a Kailasa con los Burning Ones y menos habiendo perdido 40 en el turno anterior.
¿Veremos a Ulm y a Abysia juntos?