Turno 33: febrero de 1815
El turno es bastante tranquilo en
casi todos los frentes.
Las tropas de ambas orillas del
río Niagara, mantienen sus posiciones. Los estadounidense tienen una superioridad relativa, pero están en espera de recibir refuerzos adicionales de
Buffalo y suministros dese
Sacket's Harbor. Además su intento de invasión frustado, el año pasado, les ha dejado muy mal recuerdo.
En
Plattsbourg, nuestro ejército vuelve a sufrir los efectos del hacinamiento. Espero que en las trincheras británicas ocurra lo mismo.
Pero en
Nueva Orleans, los británicos, por fin, pasan a la acción y atacan a Jackson. Las tropas estadounidenses se defienden con bravura ¡y consiguen rechazar a los británicos!, pero a un coste trágico, la
MUERTE DEL GENERAL JACKSON.
De esa manera, nuestros problemas de liderazgo (falta de puntos de mando y, ahora, calidad del líder principal), no hacen sino agravarse. El futuro vuelve a oscurecerse para los defensores de
Nueva Orleans.
Para reponernos de tan importante pérdida, y levantar un poco el ánimo, vamos con la segunda parte de nuestra
guerra de papel.
Los estadounidenses siempre se mostraron muy molestos por las prácticas de los aliados indios de los británicos. Por supuesto, preferían olvidar el trato que ellos mismos habían dado a las naciones indias desde el mismo momento de la declaración de independencia.
Así como los británicos acusaban a los EEUU de deslealtad por aprovechar la coyuntura de las guerras napoleónicas, los estadounidenses ponían el acento en las diferencias de sus relaciones internacionales con el Imperio francés y el Reino Unido. Recuérdese los conflictos con éste último anteriores al estallido de la guerra.
La victoria del comodoro Perry fue un auténtico filón para los caricaturistas estadounidenses. En muchas de sus obras, además aparecen los personajes alegóricos que, en esa época, representaban a los dos países: John Bull (Reino Unido) y Brother Jonathan (EEUU). Aquí ambos contendientes se están liando a mamporros con la victoria de Perry de fondo.
Brother Jonathan es el antecedente del Tío Sam. Su origen está en el nombre despectivo que daban los realistas norteamericanos a los patriotas de Nueva Inglaterra, durante la guerra de Independencia. En esta caricatura el mensaje es un poco menos explícito que el anterior y se presenta la victoria de Perry como un amargo trago que John Bull es obligado a ingerir.
El tema de la amarga medicina llamada Perry (o prescrita por él) dio bastante juego como podemos observar.
Los aliados franceses de los norteamericanos no perdían ocasión de criticar a los británicos. En el caso del incendio de
Washington, no les faltaba algo de razón, pues fue un acto de destrucción gratuito, sin valor militar.
En ocasiones el aguijón de los dibujantes no solo iba contra los enemigos, sino contra los tibios y los pusilánimes de su propio bando. Este es el caso de los habitantes de
Alexandria, que abrieron su ciudad a los invasores británicos sin oponer resistencia y que son aquí cruelmente ridiculizados.
El escarnio a los habitantes de
Alexandria se hacía más patente si se compraba con la resulta actitud de resistencia de los ciudadanos de
Baltimore, que consiguieron rechazar a las tropas británicas.
Hacia el final de la guerra, difícil posición de los estados de
Nueva Inglaterra a lo largo de la guerra, amenazó con provocar una catástrofe para la república. Ese peligro se manifestó en la convención de
Hartford. Como puede apreciarse el indeciso patriotismo de algunos políticos allí reunidos fue puesto en evidencia sin miramientos.
