Panzer Corps.
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Re: Panzer Corps.
Estupendo aporte
¿Misma estructura y casi mismo motor que el Order of Battle?
Por cierto, en oferta ahora mismo en Matrix Games http://www.matrixgames.com/news/2226/Pa ... NTIRE.SAGA! http://slitherine.com/products/647/deta ... Corps.Gold
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Re: Panzer Corps.
Mi opinión es que el Order of Battle es un paso más adelante. Aunque todavía tiene que crecer en escenarios.
Cuando saquen de una vez la opción de batallas skirmish será estupendo.
Post data: Por cierto, un AAR genial.
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Re: Panzer Corps.
También está esta oferta https://www.bundlestars.com/en/bundle/p ... rps-bundle
Re: Panzer Corps.
No lo he probado, pero bebiendo de la misma fuente supongo que tendrán bastante en común.
"No sé lo que hay que hacer, esto no es una guerra".
Lord Kitchener
Lord Kitchener
Re: Panzer Corps.
Turno 2.
Situación inicial.
Lo primero es eliminar la amenaza aérea. Los Saeta acuden tan raudos como su nombre indica, y entre ellos y los Bf 110D damos buena cuenta de los cazas enemigos.
Volvemos nuestra atención a los Cruiser. Los Stuka supervivientes bombardean su unidad más poderosa.
Movemos nuestras fuerzas terrestres para si es posible eliminarlos, y también a la artillería ubicada en Agedabia.
Bombardeamos los Cruiser que ya han sufrido el ataque aéreo con la artillería alemana de 10'5 cm.
Ha resultado muy eficaz: pierden un elemento de fuerza y el resto queda suprimido.
Tras los bombardeos llega la hora del asalto. Para evitar el fuego de apoyo defensivo ordenamos al 27º de Brescia, al sur de Agedabia, acabar con los 25 libras.
La ventanilla lateral nos permite comprobar que solo por hallarse en una ciudad la artillería británica ha adquirido el nivel 2 de atrincheramiento.
A pesar del riesgo de bajas ejecutamos el ataque. Los 25 libras derrochan valor y consiguen llevar a cabo una “defensa enconada”. Es necesaria la actuación de los M 13/40 cercanos para destruirlos de una vez.
Ahora podemos dirigir nuestra atención a los carros de combate británicos. Los Panzer IIIG y los Panzerjäger IB se encargarán de la unidad más poderosa.
¡Eliminada! Veamos si los Panzer IIC tienen igual éxito frente a los Cruiser que han sufrido los bombardeos.
Casi, pero no. Los últimos blindados ingleses huyen (si esto lo hubiera escrito un historiador anglosajón habría dicho “realizan una brillante retirada táctica”). No tenemos intención de permitírselo, así que, aprovechando su gran movilidad, ordenamos a la unidad de reconocimiento italiana a retaguardia que avance y acabe con ellos.
Lo hace, vengando así a sus camaradas alemanes. La infantería italiana libera Agedabia, las unidades que aún no se han movido lo hacen y los Bf 110 vuelan hacia el norte para reconocer la zona.
Nuestros cazabombarderos avistan artillería contracarro defendiendo la ruta que conduce a Bengasi y un batallón de la Francia libre al oeste de Msus.
Es el turno de los Aliados. Desde Bengasi se adelanta una batería antiaérea de Breda M35; más material perdido italiano que ahora es usado en nuestra contra. Hostiga a los Bf 110, que pierden un elemento.
Situación inicial.
Lo primero es eliminar la amenaza aérea. Los Saeta acuden tan raudos como su nombre indica, y entre ellos y los Bf 110D damos buena cuenta de los cazas enemigos.
Volvemos nuestra atención a los Cruiser. Los Stuka supervivientes bombardean su unidad más poderosa.
Movemos nuestras fuerzas terrestres para si es posible eliminarlos, y también a la artillería ubicada en Agedabia.
Bombardeamos los Cruiser que ya han sufrido el ataque aéreo con la artillería alemana de 10'5 cm.
Ha resultado muy eficaz: pierden un elemento de fuerza y el resto queda suprimido.
Tras los bombardeos llega la hora del asalto. Para evitar el fuego de apoyo defensivo ordenamos al 27º de Brescia, al sur de Agedabia, acabar con los 25 libras.
La ventanilla lateral nos permite comprobar que solo por hallarse en una ciudad la artillería británica ha adquirido el nivel 2 de atrincheramiento.
A pesar del riesgo de bajas ejecutamos el ataque. Los 25 libras derrochan valor y consiguen llevar a cabo una “defensa enconada”. Es necesaria la actuación de los M 13/40 cercanos para destruirlos de una vez.
Ahora podemos dirigir nuestra atención a los carros de combate británicos. Los Panzer IIIG y los Panzerjäger IB se encargarán de la unidad más poderosa.
¡Eliminada! Veamos si los Panzer IIC tienen igual éxito frente a los Cruiser que han sufrido los bombardeos.
Casi, pero no. Los últimos blindados ingleses huyen (si esto lo hubiera escrito un historiador anglosajón habría dicho “realizan una brillante retirada táctica”). No tenemos intención de permitírselo, así que, aprovechando su gran movilidad, ordenamos a la unidad de reconocimiento italiana a retaguardia que avance y acabe con ellos.
Lo hace, vengando así a sus camaradas alemanes. La infantería italiana libera Agedabia, las unidades que aún no se han movido lo hacen y los Bf 110 vuelan hacia el norte para reconocer la zona.
Nuestros cazabombarderos avistan artillería contracarro defendiendo la ruta que conduce a Bengasi y un batallón de la Francia libre al oeste de Msus.
Es el turno de los Aliados. Desde Bengasi se adelanta una batería antiaérea de Breda M35; más material perdido italiano que ahora es usado en nuestra contra. Hostiga a los Bf 110, que pierden un elemento.
"No sé lo que hay que hacer, esto no es una guerra".
Lord Kitchener
Lord Kitchener
Re: Panzer Corps.
Turno 3.
Nuestro operador de radio acaba de descifrar el siguiente mensaje del alto mando:
Los informes iniciales sobre la dispersión enemiga parecen confirmarse y se nos ordena que conquistemos toda la Cirenaica. ¿Qué quiere decir eso exactamente? Echemos un vistazo al mapa estratégico.
Estos del OKW han perdido la cabeza. Hacerse con todas esas localidades, incluyendo la poderosamente defendida Tobruk, en tan breve lapso de tiempo parece imposible. En fin, no nos queda más remedio que cuadrarnos e intentar cumplir el mandato.
Lo primero es reconocer el terreno. Desplazo los Bf 110D hacia el este; espero que no tengan otro encontronazo con la artillería antiaérea británica.
Detecta una unidad de infantería india y artillería contracarro al sur de Mechili. Más lejos un Daimler Dingo del Long range desert group, sin duda explorando la zona.
Pero, ¿dónde se han metido los M 13/40 enemigos? Suponen una amenaza que hay que neutralizar de inmediato. Ordenamos a los Fiat-Ansaldo AB 40 su localización.
Casi se dan de narices contra ellos. Afortunadamente las unidades de reconocimiento
tienen la peculiaridad de poder fragmentar su recorrido. Como nos quedan puntos de movimiento retrocedemos.
Acabemos con ellos sin dilación. Adelantamos nuestros tanques y la unidad cazacarros.
Desarrollo del combate:
1.- los Panzer IIIG abren fuego, produciendo graves bajas. El enemigo retrocede.
2.- los Stuka los debilitan aun más.
3.- los Panzer IIC les dan el golpe de gracia.
Los Saeta tienen poco combustible. Regresan al aeropuerto a repostar y a cubrir las bajas sufridas. En la esquina superior derecha podemos ver como junto al número que indica la fuerza de la escuadrilla de Stukas ha aparecido el símbolo de unas bombas; señala que casi no le queda munición.
Tras los movimientos finales la situación queda así:
Es el turno británico. El batallón de la Francia libre situado al oeste de Msus demuestra más arrojo que inteligencia atacando a nuestros Panzer IIIG en campo abierto. Pierde la mitad de los hombres sin causar ningún daño y huye hasta la población, donde se atrinchera.
Nuestro operador de radio acaba de descifrar el siguiente mensaje del alto mando:
Los informes iniciales sobre la dispersión enemiga parecen confirmarse y se nos ordena que conquistemos toda la Cirenaica. ¿Qué quiere decir eso exactamente? Echemos un vistazo al mapa estratégico.
Estos del OKW han perdido la cabeza. Hacerse con todas esas localidades, incluyendo la poderosamente defendida Tobruk, en tan breve lapso de tiempo parece imposible. En fin, no nos queda más remedio que cuadrarnos e intentar cumplir el mandato.
Lo primero es reconocer el terreno. Desplazo los Bf 110D hacia el este; espero que no tengan otro encontronazo con la artillería antiaérea británica.
Detecta una unidad de infantería india y artillería contracarro al sur de Mechili. Más lejos un Daimler Dingo del Long range desert group, sin duda explorando la zona.
Pero, ¿dónde se han metido los M 13/40 enemigos? Suponen una amenaza que hay que neutralizar de inmediato. Ordenamos a los Fiat-Ansaldo AB 40 su localización.
Casi se dan de narices contra ellos. Afortunadamente las unidades de reconocimiento
tienen la peculiaridad de poder fragmentar su recorrido. Como nos quedan puntos de movimiento retrocedemos.
Acabemos con ellos sin dilación. Adelantamos nuestros tanques y la unidad cazacarros.
Desarrollo del combate:
1.- los Panzer IIIG abren fuego, produciendo graves bajas. El enemigo retrocede.
2.- los Stuka los debilitan aun más.
3.- los Panzer IIC les dan el golpe de gracia.
Los Saeta tienen poco combustible. Regresan al aeropuerto a repostar y a cubrir las bajas sufridas. En la esquina superior derecha podemos ver como junto al número que indica la fuerza de la escuadrilla de Stukas ha aparecido el símbolo de unas bombas; señala que casi no le queda munición.
Tras los movimientos finales la situación queda así:
Es el turno británico. El batallón de la Francia libre situado al oeste de Msus demuestra más arrojo que inteligencia atacando a nuestros Panzer IIIG en campo abierto. Pierde la mitad de los hombres sin causar ningún daño y huye hasta la población, donde se atrinchera.
"No sé lo que hay que hacer, esto no es una guerra".
Lord Kitchener
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Re: Panzer Corps.
Turno 4.
¿Cómo han quedado las condiciones de victoria tras la ampliación de objetivos del turno anterior?
Pues tenemos que conquistar todos para lograr una victoria decisiva; ardua tarea. La victoria marginal resulta mucho más sencilla: basta uno de ellos.
No desfallezcamos. Por el momento nuestros soldados, alemanes o italianos, han respondido bien, y los contratiempos han sido pocos. Más que el enemigo es el tiempo lo que nos preocupa. Perderlo es un crimen, así que continuemos la ofensiva con brío y determinación.
Como es habitual, la Luftwaffe llevará la iniciativa. Los Bf 110D atacan el Daimler Dingo, al que provocan bajas leves. Al mismo tiempo la escuadrilla de Stuka bombardea el batallón de la Francia libre refugiado en Msus y reduce su atrincheramiento del nivel 3 al 2. Con ello consume sus últimas municiones.
Rodeamos en lo posible dicha ciudad y procedemos al asalto. Las unidades blindadas no se desempeñan bien en entornos urbanos, así que utilizamos como fuerza de choque a nuestros probados bersaglieri. Pierden dos elementos, pero logran debilitar lo suficiente a los galos como para que el regimiento de M 13/40 de la Ariete acabe con ellos.
Para dificultar que los británicos nos localicen lanzamos los Panzer IIC y los AB 40 contra el Dingo.
Aunque muy mermados los escurridizos hombres del Long range desert group logran retroceder.
Movemos el resto de unidades terrestres. La desguarnecida Msus es ocupada sin dificultad.
Los 105 mm. italianos bombardean la batería contracarro enemiga que protege la ruta a Bengasi con eficacia: un elemento eliminado, cinco suprimidos y desaparición del atrincheramiento.
¿Qué ha sido de nuestros Macchi M.C. Saetta? Toda unidad aérea que concluye el turno en un aeródromo propio o en cualquiera de sus hexágonos adyacentes reposta automáticamente combustible y munición, como podemos comprobar.
De igual forma solo en un aeropuerto pueden cubrir bajas. Será la única acción permitida durante el turno. Decidimos aprovechar y sustituir a los hombres caídos.
Se puede optar entre reemplazos normales
o de élite.
Como indican las ventanas informativas los normales cuestan menos prestigio pero reducen la experiencia de la unidad, mientras que los de élite son más costosos pero la veteranía se mantiene. En este caso la diferencia es tan pequeña que elegimos los normales.
Situación tras nuestras últimas órdenes.
Los aliados contraatacan. Una nueva escuadrilla de Hurricane surge del horizonte y se abate sobre los Bf 110D. Gracias a la habilidad de su tripulación solo pierden un elemento.
Casi a la vez tanques ligeros Vickers Mk. VI se enfrentan a los Panzer IIC, perdiendo cada uno un elemento.
El Dingo aprovecha la confusión y recibe refuerzos.
¿Cómo han quedado las condiciones de victoria tras la ampliación de objetivos del turno anterior?
Pues tenemos que conquistar todos para lograr una victoria decisiva; ardua tarea. La victoria marginal resulta mucho más sencilla: basta uno de ellos.
No desfallezcamos. Por el momento nuestros soldados, alemanes o italianos, han respondido bien, y los contratiempos han sido pocos. Más que el enemigo es el tiempo lo que nos preocupa. Perderlo es un crimen, así que continuemos la ofensiva con brío y determinación.
Como es habitual, la Luftwaffe llevará la iniciativa. Los Bf 110D atacan el Daimler Dingo, al que provocan bajas leves. Al mismo tiempo la escuadrilla de Stuka bombardea el batallón de la Francia libre refugiado en Msus y reduce su atrincheramiento del nivel 3 al 2. Con ello consume sus últimas municiones.
Rodeamos en lo posible dicha ciudad y procedemos al asalto. Las unidades blindadas no se desempeñan bien en entornos urbanos, así que utilizamos como fuerza de choque a nuestros probados bersaglieri. Pierden dos elementos, pero logran debilitar lo suficiente a los galos como para que el regimiento de M 13/40 de la Ariete acabe con ellos.
Para dificultar que los británicos nos localicen lanzamos los Panzer IIC y los AB 40 contra el Dingo.
Aunque muy mermados los escurridizos hombres del Long range desert group logran retroceder.
Movemos el resto de unidades terrestres. La desguarnecida Msus es ocupada sin dificultad.
Los 105 mm. italianos bombardean la batería contracarro enemiga que protege la ruta a Bengasi con eficacia: un elemento eliminado, cinco suprimidos y desaparición del atrincheramiento.
¿Qué ha sido de nuestros Macchi M.C. Saetta? Toda unidad aérea que concluye el turno en un aeródromo propio o en cualquiera de sus hexágonos adyacentes reposta automáticamente combustible y munición, como podemos comprobar.
De igual forma solo en un aeropuerto pueden cubrir bajas. Será la única acción permitida durante el turno. Decidimos aprovechar y sustituir a los hombres caídos.
Se puede optar entre reemplazos normales
o de élite.
Como indican las ventanas informativas los normales cuestan menos prestigio pero reducen la experiencia de la unidad, mientras que los de élite son más costosos pero la veteranía se mantiene. En este caso la diferencia es tan pequeña que elegimos los normales.
Situación tras nuestras últimas órdenes.
Los aliados contraatacan. Una nueva escuadrilla de Hurricane surge del horizonte y se abate sobre los Bf 110D. Gracias a la habilidad de su tripulación solo pierden un elemento.
Casi a la vez tanques ligeros Vickers Mk. VI se enfrentan a los Panzer IIC, perdiendo cada uno un elemento.
El Dingo aprovecha la confusión y recibe refuerzos.
"No sé lo que hay que hacer, esto no es una guerra".
Lord Kitchener
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Re: Panzer Corps.
Turno 5.
El dominio del cielo es fundamental para la victoria. Hay que acabar con los Hurricane a toda costa. Desplazamos a la zona los Sd.Kfz. 10/4 y la remozada escuadrilla de Saetas.
Desarrollo del combate:
1.- la flak 30 de los Sd.Kfz. 10/4 dispara causando la pérdida de tres elementos.
2.- los Saeta prosiguen el acoso y sin experimentar bajas producen dos al enemigo.
3.- llega la hora de la revancha para los Bf 110D, que derriban a sus adversarios a cambio de un elemento.
Tras el castigo sufrido recientemente los Stuka y los Bf 110D necesitan una puesta a punto, por lo que regresan al aeropuerto. Podemos contemplar cómo junto al número que indica la fuerza de los primeros aparece una lata de combustible, advirtiendo de que el depósito está a punto de agotarse, y el ya conocido de las bombas, esta vez de color rojo por no quedar municiones.
Les toca a los Vickers Mk. VI y al Dingo. Hacemos avanzar las unidades blindadas más cercanas. Los Panzerjäger acometen a los carros británicos con rotundo éxito, destruyéndolos del todo.
Al sur aparece una pequeña unidad fronteriza aliada. Sin prestarle atención los Panzer IIC se dirigen contra los Daimler Dingo. A pesar de hallarse en estado de supresión escapan al aniquilamiento una vez más, retrocediendo hacia Bir Hakeim.
Volvamos la mirada a Bengasi. Solicitamos reemplazos para los bersaglieri y los Panzer IIIG, de élite para estos y normales para aquellos. Por tanto no podrán moverse ni combatir durante el turno.
Afortunadamente disponemos de más unidades en la zona. Su misión: acabar con la batería antitanque que defiende la carretera. La rodeamos y comienzan las hostilidades.
Fases de la lucha:
1.- bombardeo de la artillería italiana de 105 mm. Acaba con tres elementos enemigos y suprime al resto.
2.- la unidad de granaderos alemanes armada con ametralladoras abre un fuego devastador. El enemigo retrocede con fuertes pérdidas.
3.- sin mostrar compasión los 10'5 cm. alemanes les dirigen sus andanadas. No causan bajas, pero la supresión pasa a ser total.
Situación después de los últimos encuentros:
El frente se está extendiendo mucho y el tiempo apremia. Llega el momento de planear con cuidado las futuras operaciones. Tras mucho cavilar se decide dividir las fuerzas en dos grupos. Uno, formado por tres unidades de infantería, dos de artillería y una batería contracarro ascenderá por la franja costera, intentando conquistar Bengasi, Barce y Derna. El resto actuará en la llanura interior, progresando hacia el este con la mayor celeridad.
Vamos a necesitar toda la ayuda posible. En este escenario se nos permite adquirir dos unidades, pero de momento nos limitaremos a una. Tendrá la categoría de nuclear, así que hay que elegir bien.
Andamos algo flojos de artillería. Hemos sido testigos de su importante papel ofensivo y defensivo, y de su utilidad a la hora de eliminar atrincheramientos. Optamos en consecuencia por una batería alemana de 10'5 cm., remolcada por camiones Opel Blitz.
Puede aparecer en cualquier ciudad que haya estado en nuestro poder durante dos turnos, o en sus hexágonos adyacentes.
Por la cercanía al frente la desplegamos en Agedabia.
Movemos las últimas tropas. Situación final:
El dominio del cielo es fundamental para la victoria. Hay que acabar con los Hurricane a toda costa. Desplazamos a la zona los Sd.Kfz. 10/4 y la remozada escuadrilla de Saetas.
Desarrollo del combate:
1.- la flak 30 de los Sd.Kfz. 10/4 dispara causando la pérdida de tres elementos.
2.- los Saeta prosiguen el acoso y sin experimentar bajas producen dos al enemigo.
3.- llega la hora de la revancha para los Bf 110D, que derriban a sus adversarios a cambio de un elemento.
Tras el castigo sufrido recientemente los Stuka y los Bf 110D necesitan una puesta a punto, por lo que regresan al aeropuerto. Podemos contemplar cómo junto al número que indica la fuerza de los primeros aparece una lata de combustible, advirtiendo de que el depósito está a punto de agotarse, y el ya conocido de las bombas, esta vez de color rojo por no quedar municiones.
Les toca a los Vickers Mk. VI y al Dingo. Hacemos avanzar las unidades blindadas más cercanas. Los Panzerjäger acometen a los carros británicos con rotundo éxito, destruyéndolos del todo.
Al sur aparece una pequeña unidad fronteriza aliada. Sin prestarle atención los Panzer IIC se dirigen contra los Daimler Dingo. A pesar de hallarse en estado de supresión escapan al aniquilamiento una vez más, retrocediendo hacia Bir Hakeim.
Volvamos la mirada a Bengasi. Solicitamos reemplazos para los bersaglieri y los Panzer IIIG, de élite para estos y normales para aquellos. Por tanto no podrán moverse ni combatir durante el turno.
Afortunadamente disponemos de más unidades en la zona. Su misión: acabar con la batería antitanque que defiende la carretera. La rodeamos y comienzan las hostilidades.
Fases de la lucha:
1.- bombardeo de la artillería italiana de 105 mm. Acaba con tres elementos enemigos y suprime al resto.
2.- la unidad de granaderos alemanes armada con ametralladoras abre un fuego devastador. El enemigo retrocede con fuertes pérdidas.
3.- sin mostrar compasión los 10'5 cm. alemanes les dirigen sus andanadas. No causan bajas, pero la supresión pasa a ser total.
Situación después de los últimos encuentros:
El frente se está extendiendo mucho y el tiempo apremia. Llega el momento de planear con cuidado las futuras operaciones. Tras mucho cavilar se decide dividir las fuerzas en dos grupos. Uno, formado por tres unidades de infantería, dos de artillería y una batería contracarro ascenderá por la franja costera, intentando conquistar Bengasi, Barce y Derna. El resto actuará en la llanura interior, progresando hacia el este con la mayor celeridad.
Vamos a necesitar toda la ayuda posible. En este escenario se nos permite adquirir dos unidades, pero de momento nos limitaremos a una. Tendrá la categoría de nuclear, así que hay que elegir bien.
Andamos algo flojos de artillería. Hemos sido testigos de su importante papel ofensivo y defensivo, y de su utilidad a la hora de eliminar atrincheramientos. Optamos en consecuencia por una batería alemana de 10'5 cm., remolcada por camiones Opel Blitz.
Puede aparecer en cualquier ciudad que haya estado en nuestro poder durante dos turnos, o en sus hexágonos adyacentes.
Por la cercanía al frente la desplegamos en Agedabia.
Movemos las últimas tropas. Situación final:
"No sé lo que hay que hacer, esto no es una guerra".
Lord Kitchener
Lord Kitchener
Re: Panzer Corps.
Turno 6.
¿Cómo van las cosas por el aeródromo? Los Bf 110D y los Stuka han repostado munición y combustible, pero falta cubrir las bajas. Solo se pueden pedir reemplazos para las unidades aéreas si se encuentran precisamente en el hexágono del aeropuerto, no basta estar en los adyacentes. Los solicitamos para los Bf 110D, normales en esta ocasión, porque los de élite resultan demasiado costosos. La escuadrilla de Stuka seguirá donde está hasta que a su vez la pongamos a pleno rendimiento.
A falta de cazas enemigos que combatir los Saeta ametrallan a la infantería india situada al sur de Mechili. El ataque a tierra no es en lo que más destacan, pero algo de pupa siempre harán.
En la imagen anterior vemos hexágonos señalados en rojo. Son aquellos fuera de la autonomía de vuelo de los Saeta. Si se aventurasen hasta allí no les quedaría suficiente combustible para regresar al aeropuerto.
El ataque de nuestros cazas no produce bajas, pero reduce el atrincheramiento enemigo del nivel 4 al 3. Además han divisado al 2nd Royal lancers en la población, con atrincheramiento 6, y hacia el sureste artillería de 25 libras y más infantería india. Mechili está bien defendida, vamos a tener que emplearnos a fondo.
A la derecha de la imagen destaca el imponente campo fortificado de Tobruk. Su guarnición queda oculta por la niebla de guerra, pero no le irá a la zaga.
No nos hemos olvidado de nuestros viejos conocidos del Long range desert group. Los rodeamos por tres flancos. A continuación los ataques combinados de los Panzer IIC y los Panzerjäger logran, ¡por fin!, aniquilarlos.
En el oasis de Bir Hakeim descubren una poderosa unidad británica de infantería. Está reforzada, pues aunque sus elementos nominales son diez tiene doce. En “Panzer Corps” por cada nivel de experiencia que se alcance se permite adquirir un elemento por encima de la plantilla normal.
La lucha en la zona se adivina encarnizada. Las tropas deben estar al cien por cien, así que pedimos reemplazos normales para los M 13/40 tocados.
En Bengasi las cosas no están menos calientes. Las baterías italianas y alemanas golpean a los contracarro aliados. Nuestra infantería avanza y el 27º de Brescia acaba con ellos.
Conseguimos ahora una buena visión de Bengasi. Está protegida por el 1º de Northumberland, con atrincheramiento 6. En el aeropuerto se hallan los Breda que dispararon contra nuestros Bf 110.
Situación tras los movimientos finales.
¿Cómo van las cosas por el aeródromo? Los Bf 110D y los Stuka han repostado munición y combustible, pero falta cubrir las bajas. Solo se pueden pedir reemplazos para las unidades aéreas si se encuentran precisamente en el hexágono del aeropuerto, no basta estar en los adyacentes. Los solicitamos para los Bf 110D, normales en esta ocasión, porque los de élite resultan demasiado costosos. La escuadrilla de Stuka seguirá donde está hasta que a su vez la pongamos a pleno rendimiento.
A falta de cazas enemigos que combatir los Saeta ametrallan a la infantería india situada al sur de Mechili. El ataque a tierra no es en lo que más destacan, pero algo de pupa siempre harán.
En la imagen anterior vemos hexágonos señalados en rojo. Son aquellos fuera de la autonomía de vuelo de los Saeta. Si se aventurasen hasta allí no les quedaría suficiente combustible para regresar al aeropuerto.
El ataque de nuestros cazas no produce bajas, pero reduce el atrincheramiento enemigo del nivel 4 al 3. Además han divisado al 2nd Royal lancers en la población, con atrincheramiento 6, y hacia el sureste artillería de 25 libras y más infantería india. Mechili está bien defendida, vamos a tener que emplearnos a fondo.
A la derecha de la imagen destaca el imponente campo fortificado de Tobruk. Su guarnición queda oculta por la niebla de guerra, pero no le irá a la zaga.
No nos hemos olvidado de nuestros viejos conocidos del Long range desert group. Los rodeamos por tres flancos. A continuación los ataques combinados de los Panzer IIC y los Panzerjäger logran, ¡por fin!, aniquilarlos.
En el oasis de Bir Hakeim descubren una poderosa unidad británica de infantería. Está reforzada, pues aunque sus elementos nominales son diez tiene doce. En “Panzer Corps” por cada nivel de experiencia que se alcance se permite adquirir un elemento por encima de la plantilla normal.
La lucha en la zona se adivina encarnizada. Las tropas deben estar al cien por cien, así que pedimos reemplazos normales para los M 13/40 tocados.
En Bengasi las cosas no están menos calientes. Las baterías italianas y alemanas golpean a los contracarro aliados. Nuestra infantería avanza y el 27º de Brescia acaba con ellos.
Conseguimos ahora una buena visión de Bengasi. Está protegida por el 1º de Northumberland, con atrincheramiento 6. En el aeropuerto se hallan los Breda que dispararon contra nuestros Bf 110.
Situación tras los movimientos finales.
"No sé lo que hay que hacer, esto no es una guerra".
Lord Kitchener
Lord Kitchener
Re: Panzer Corps.
Turno 7.
Visión general de la Cirenaica:
Como de costumbre, empezamos con las operaciones aéreas. Los Bf 110D vuelan hacia el noreste para apoyar la conquista de Mechili.
La plaza en los hangares del aeropuerto es entonces ocupada por los Stuka. En el próximo turno obtendrán refuerzos; en este no es posible por haberse movido.
La escuadrilla de Saeta realiza una nueva pasada sobre los indios y pone rumbo al aeródromo. Ya era hora: el depósito de combustible se encuentra casi vacío.
En Bengasi nuestras fuerzas se van abriendo camino.
1.- La artillería italiana de 105 mm. bombardea al 1º de Northumberland, reduciendo su atrincheramiento del nivel 6 al 5.
2.- Los 10'5 cm. alemanes abren fuego sobre la batería de Breda emplazada en el aeropuerto. Les hacen perder un elemento y suprimen cuatro.
Llega el momento del avance terrestre. Granaderos alemanes e infantes italianos acaban con los Breda.
Tras los últimos movimientos, la situación en Bengasi queda así:
En Mechili, bien defendida, obramos con más prudencia. Despliegue inicial de las tropas:
Los Panzer IIIG contactan con la infantería india, sin atacarla. Al mismo tiempo empezamos a rodear la ciudad por el sureste, procurando mantenernos lejos del alcance de los 25 libras.
Solicitamos reemplazos para los Panzer IIC y los Panzerjäger, que tan bien han luchado hasta ahora.
Nuestra progresión ha dejado a la vista en parte los protectores de Tobruk: infantería y artillería reforzadas y fortines. Comunicada la información al alto mando, obtenemos la siguiente respuesta:
Se impone la cordura. La plaza deja de ser un objetivo. Basta por el momento con aislarla del resto de las tropas británicas.
Les toca a los aliados. La guarnición de Bengasi ocupa el aeródromo y ataca al 27º de Brescia, al que hacen perder dos elementos a cambio de tres propios. Ha sido una acción descabellada, pues al moverse han perdido su mayor ventaja, el atrincheramiento.
En Mechili el enemigo tampoco se muestra muy hábil. La unidad india acomete a los Panzer IIIG. Que la infantería combata contra los tanques en terreno despejado siempre es mala idea. Además previamente los 10'5 cm. alemanes recién incorporados a filas abren fuego defensivo. Resultado: los indios pierden tres elementos sin causar daño ninguno.
Visión general de la Cirenaica:
Como de costumbre, empezamos con las operaciones aéreas. Los Bf 110D vuelan hacia el noreste para apoyar la conquista de Mechili.
La plaza en los hangares del aeropuerto es entonces ocupada por los Stuka. En el próximo turno obtendrán refuerzos; en este no es posible por haberse movido.
La escuadrilla de Saeta realiza una nueva pasada sobre los indios y pone rumbo al aeródromo. Ya era hora: el depósito de combustible se encuentra casi vacío.
En Bengasi nuestras fuerzas se van abriendo camino.
1.- La artillería italiana de 105 mm. bombardea al 1º de Northumberland, reduciendo su atrincheramiento del nivel 6 al 5.
2.- Los 10'5 cm. alemanes abren fuego sobre la batería de Breda emplazada en el aeropuerto. Les hacen perder un elemento y suprimen cuatro.
Llega el momento del avance terrestre. Granaderos alemanes e infantes italianos acaban con los Breda.
Tras los últimos movimientos, la situación en Bengasi queda así:
En Mechili, bien defendida, obramos con más prudencia. Despliegue inicial de las tropas:
Los Panzer IIIG contactan con la infantería india, sin atacarla. Al mismo tiempo empezamos a rodear la ciudad por el sureste, procurando mantenernos lejos del alcance de los 25 libras.
Solicitamos reemplazos para los Panzer IIC y los Panzerjäger, que tan bien han luchado hasta ahora.
Nuestra progresión ha dejado a la vista en parte los protectores de Tobruk: infantería y artillería reforzadas y fortines. Comunicada la información al alto mando, obtenemos la siguiente respuesta:
Se impone la cordura. La plaza deja de ser un objetivo. Basta por el momento con aislarla del resto de las tropas británicas.
Les toca a los aliados. La guarnición de Bengasi ocupa el aeródromo y ataca al 27º de Brescia, al que hacen perder dos elementos a cambio de tres propios. Ha sido una acción descabellada, pues al moverse han perdido su mayor ventaja, el atrincheramiento.
En Mechili el enemigo tampoco se muestra muy hábil. La unidad india acomete a los Panzer IIIG. Que la infantería combata contra los tanques en terreno despejado siempre es mala idea. Además previamente los 10'5 cm. alemanes recién incorporados a filas abren fuego defensivo. Resultado: los indios pierden tres elementos sin causar daño ninguno.
"No sé lo que hay que hacer, esto no es una guerra".
Lord Kitchener
Lord Kitchener
Re: Panzer Corps.
Turno 8.
Vista global en el mapa estratégico, aunque solo aparecen unidades terrestres:
Los Saeta llegan al aeropuerto con el depósito en rojo. Allí encuentran a los Stuka, para los que se acaba de pedir reemplazos normales.
En Bengasi la artillería italiana de 105 mm. (1) abre fuego sobre los británicos, causando supresión total.
A continuación atacan los granaderos. El enemigo sufre dos bajas y retrocede.
Los infantes italianos avanzan y acaban con los de Northumberland.
Se adelanta el resto de unidades. Bengasi, el objetivo original, ha sido liberada. En el aeródromo, sin embargo, sigue ondeando la bandera del Reino Unido porque en “Panzer Corps” no se concede a las unidades artilleras la aptitud de conquistar plazas.
Así están las cosas más al este, en Mechili.
Lo primero es ocuparse de los 25 libras. La escuadrilla de Bf 110D los bombardea, produciendo dos bajas.
Prosiguen la labor los 10'5 cm. alemanes. Eliminan un elemento y suprimen cinco. Conviene saber que su alcance es de tres hexágonos, mientras que el de los 25 libras es de dos.
Los bersaglieri asaltan las posiciones de la batería contracarro. Nuestros hombres pierden un elemento y el adversario dos. Los debilitados 25 libras efectuaron fuego de apoyo, pero sin resultado.
Los Panzer IIIG disparan contra el 11th prince Albert cav. De nuevo los 25 libras abren fuego infructuosamente. Con todo en su contra los soldados indios se aferran al terreno, desarrollan una defensa enconada y causan dos bajas a nuestros tanques, sin experimentarlas a su vez.
Aprovechando que se halla desguarnecida los autoblinda 40 ocupan Tmimi.
Desde allí divisan Derna, al noroeste. Está defendida por el cuartel general de la 9th Australian div. También descubren artillería antiaérea en Tobruk, cómo no, reforzada.
He ganado bastante prestigio últimamente. Adquiero una nueva unidad, artillería alemana de 15 cm. remolcada por Opel Blitz. Será de gran utilidad a la hora de demoler las trincheras aliadas.
Situación final en Mechili, con la nueva pieza desplegada en Msus.
Acciones enemigas:
─ Bengasi. Daimler Dingos provenientes de Barcia arrollan las posiciones del 27º de Brescia, provocándole tres bajas a cambio de una propia.
─ Mechili: los 25 libras y la infantería india llevan a cabo un ataque combinado sobre los bersaglieri, que sufren dos bajas no sin causar una a los asiáticos.
Vista global en el mapa estratégico, aunque solo aparecen unidades terrestres:
Los Saeta llegan al aeropuerto con el depósito en rojo. Allí encuentran a los Stuka, para los que se acaba de pedir reemplazos normales.
En Bengasi la artillería italiana de 105 mm. (1) abre fuego sobre los británicos, causando supresión total.
A continuación atacan los granaderos. El enemigo sufre dos bajas y retrocede.
Los infantes italianos avanzan y acaban con los de Northumberland.
Se adelanta el resto de unidades. Bengasi, el objetivo original, ha sido liberada. En el aeródromo, sin embargo, sigue ondeando la bandera del Reino Unido porque en “Panzer Corps” no se concede a las unidades artilleras la aptitud de conquistar plazas.
Así están las cosas más al este, en Mechili.
Lo primero es ocuparse de los 25 libras. La escuadrilla de Bf 110D los bombardea, produciendo dos bajas.
Prosiguen la labor los 10'5 cm. alemanes. Eliminan un elemento y suprimen cinco. Conviene saber que su alcance es de tres hexágonos, mientras que el de los 25 libras es de dos.
Los bersaglieri asaltan las posiciones de la batería contracarro. Nuestros hombres pierden un elemento y el adversario dos. Los debilitados 25 libras efectuaron fuego de apoyo, pero sin resultado.
Los Panzer IIIG disparan contra el 11th prince Albert cav. De nuevo los 25 libras abren fuego infructuosamente. Con todo en su contra los soldados indios se aferran al terreno, desarrollan una defensa enconada y causan dos bajas a nuestros tanques, sin experimentarlas a su vez.
Aprovechando que se halla desguarnecida los autoblinda 40 ocupan Tmimi.
Desde allí divisan Derna, al noroeste. Está defendida por el cuartel general de la 9th Australian div. También descubren artillería antiaérea en Tobruk, cómo no, reforzada.
He ganado bastante prestigio últimamente. Adquiero una nueva unidad, artillería alemana de 15 cm. remolcada por Opel Blitz. Será de gran utilidad a la hora de demoler las trincheras aliadas.
Situación final en Mechili, con la nueva pieza desplegada en Msus.
Acciones enemigas:
─ Bengasi. Daimler Dingos provenientes de Barcia arrollan las posiciones del 27º de Brescia, provocándole tres bajas a cambio de una propia.
─ Mechili: los 25 libras y la infantería india llevan a cabo un ataque combinado sobre los bersaglieri, que sufren dos bajas no sin causar una a los asiáticos.
"No sé lo que hay que hacer, esto no es una guerra".
Lord Kitchener
Lord Kitchener
Re: Panzer Corps.
Turno 9.
Vista global en el mapa estratégico:
Situación inicial en el frente de Bengasi:
El ataque de los Dingo en el anterior turno se vio favorecido porque nuestra artillería se encontraba en modo viaje, no pudiendo en consecuencia aportar fuego de apoyo defensivo. Ya no es el caso, como aprenden bien a su costa dichos valentones. La descarga cerrada de nuestras baterías les produce tres bajas y suprime al resto.
Aun en pleno desconcierto ven abalanzarse sobre ellos al MG-Bataillon 2. Incapaces de plantar cara los Daimler Dingo retroceden, lamentando la pérdida de dos elementos más.
El 27º de Brescia no quiere ser menos. La unidad presente en Bengasi acude rápidamente a primera línea y muestra a los británicos que la victoria sobre sus compañeros no fue más que un desafortunado contratiempo.
Así quedan los contendientes tras los últimos movimientos. La unidad de reconocimiento aliada ha sobrevivido a duras penas. En Barce se descubre una guarnición enemiga, que compensa su pequeño tamaño con un atrincheramiento de nivel 7. La artillería italiana y los granaderos casi no tienen munición. Los soldados que soportaron el embate de los Dingo en el anterior turno conquistan el aeropuerto; nuestros aeroplanos ya no tendrán que volar hasta las cercanías de El Agheila para repostar.
Las escuadrillas de Saeta y Stuka, recién llegadas a Mechili, contemplan el despliegue de los dos ejércitos a sus pies.
Tras la fase de maniobras parece que ha llegado el momento de pasar a la ofensiva. La tensión va creciendo, y cuando por fin se reciben las órdenes nuestros hombres dejan escapar un suspiro de alivio.
Como es habitual la Luftwaffe se apunta el primer tanto. Los Bf 110D bombardean los cañones de 25 libras, eliminando dos elementos.
Otros dos elementos les hace perder la artillería germana de 10'5 cm., suprimiendo al resto.
Cuando los M 13/40 surgen a sus espaldas los angustiados artilleros británicos casi no tienen capacidad de reacción. Son destruidos.
Rodeamos la pieza antitanque enemiga. Nuestros 8'8 abren fuego contra ella. El duelo artillero resulta una dura experiencia para ambos bandos: los aliados pierden tres elementos, los alemanes dos.
Le toca a nuestra más experimentada fuerza de choque, los bersaglieri. A costa de un elemento causan cuatro bajas a la batería contracarro, que se ve forzada a ceder el terreno.
Los Panzer IIIG le dan la puntilla.
Haber acabado con las piezas inglesas facilitará enormemente la conquista de Mechili. El MG-Bataillon 8 ataca a la infantería india. Producen tres bajas al enemigo, que retrocede, teniendo que lamentar a cambio dos propias.
Nuestras últimas instrucciones son para solicitar reemplazos para los AB 40 presentes en Tmimi. La zona queda así:
El turno resulta movido hasta el final. Los Panzer IIC se ven acometidos desde el norte por el 18th prince Albert cav. Aunque la sorpresa hace que nuestros hombres pierdan dos elementos, logran rehacerse y causar tres bajas al adversario.
Vista global en el mapa estratégico:
Situación inicial en el frente de Bengasi:
El ataque de los Dingo en el anterior turno se vio favorecido porque nuestra artillería se encontraba en modo viaje, no pudiendo en consecuencia aportar fuego de apoyo defensivo. Ya no es el caso, como aprenden bien a su costa dichos valentones. La descarga cerrada de nuestras baterías les produce tres bajas y suprime al resto.
Aun en pleno desconcierto ven abalanzarse sobre ellos al MG-Bataillon 2. Incapaces de plantar cara los Daimler Dingo retroceden, lamentando la pérdida de dos elementos más.
El 27º de Brescia no quiere ser menos. La unidad presente en Bengasi acude rápidamente a primera línea y muestra a los británicos que la victoria sobre sus compañeros no fue más que un desafortunado contratiempo.
Así quedan los contendientes tras los últimos movimientos. La unidad de reconocimiento aliada ha sobrevivido a duras penas. En Barce se descubre una guarnición enemiga, que compensa su pequeño tamaño con un atrincheramiento de nivel 7. La artillería italiana y los granaderos casi no tienen munición. Los soldados que soportaron el embate de los Dingo en el anterior turno conquistan el aeropuerto; nuestros aeroplanos ya no tendrán que volar hasta las cercanías de El Agheila para repostar.
Las escuadrillas de Saeta y Stuka, recién llegadas a Mechili, contemplan el despliegue de los dos ejércitos a sus pies.
Tras la fase de maniobras parece que ha llegado el momento de pasar a la ofensiva. La tensión va creciendo, y cuando por fin se reciben las órdenes nuestros hombres dejan escapar un suspiro de alivio.
Como es habitual la Luftwaffe se apunta el primer tanto. Los Bf 110D bombardean los cañones de 25 libras, eliminando dos elementos.
Otros dos elementos les hace perder la artillería germana de 10'5 cm., suprimiendo al resto.
Cuando los M 13/40 surgen a sus espaldas los angustiados artilleros británicos casi no tienen capacidad de reacción. Son destruidos.
Rodeamos la pieza antitanque enemiga. Nuestros 8'8 abren fuego contra ella. El duelo artillero resulta una dura experiencia para ambos bandos: los aliados pierden tres elementos, los alemanes dos.
Le toca a nuestra más experimentada fuerza de choque, los bersaglieri. A costa de un elemento causan cuatro bajas a la batería contracarro, que se ve forzada a ceder el terreno.
Los Panzer IIIG le dan la puntilla.
Haber acabado con las piezas inglesas facilitará enormemente la conquista de Mechili. El MG-Bataillon 8 ataca a la infantería india. Producen tres bajas al enemigo, que retrocede, teniendo que lamentar a cambio dos propias.
Nuestras últimas instrucciones son para solicitar reemplazos para los AB 40 presentes en Tmimi. La zona queda así:
El turno resulta movido hasta el final. Los Panzer IIC se ven acometidos desde el norte por el 18th prince Albert cav. Aunque la sorpresa hace que nuestros hombres pierdan dos elementos, logran rehacerse y causar tres bajas al adversario.
"No sé lo que hay que hacer, esto no es una guerra".
Lord Kitchener
Lord Kitchener
Re: Panzer Corps.
Turno 10.
Vista global en el mapa estratégico:
En Bengasi los Daimler Dingo han recibido reemplazos. Pronto lamentan su nuevo destino, pues la artillería alemana de 10'5 cm (1) les hace blanco de sus proyectiles hasta generar supresión total.
Toma el relevo el 27º de Brescia. Los británicos pierden un elemento y retroceden...
...poniéndose al alcance de los granaderos, que a costa de dos elementos y sus últimas municiones logran destruirlos.
Se reabastece la batería de 105 mm. y se piden reemplazos para la unidad italiana emplazada en el aeródromo. Esta vez de élite, ya que la tropa ha alcanzado una experiencia de 110 y conviene conservarla.
Alejémonos de la costa y vayamos a la desértica llanura interior.
Nuestra aviación se encuentra plenamente operativa. Sin cazas ni antiaéreos enemigos en la zona puede dedicarse a colaborar en el ataque a tierra.
Los Bf 110D bombardean al 11th prince Albert cav., mas sin resultado.
Sus compatriotas del 18th prince Albert cav. reciben la visita de los Saeta, pero parece que nuestros pilotos no andan muy inspirados y los asiáticos salen indemnes.
El ataque más devastador se efectúa sobre los defensores de Mechili, que sufren el fuego combinado de la escuadrilla de Stuka y las piezas de 15 (1) y 10'5 cm. (2). El atrincheramiento se reduce de 7 a 4, y dos elementos son suprimidos.
Llega el momento de las operaciones terrestres. Rodeamos al 18th prince Albert cav.
Fases del combate:
1.- los M 13/40 encabezan la lucha, provocando dos bajas al adversario y sufriendo una.
2.- los Panzer IIC abren fuego, sin efectividad.
3.- los Panzer IIIG causan cuatro bajas. El enemigo se rinde.
Los restantes tanques de la 132 Ariete se hacen cargo del 11th prince Albert cav. Los destruyen a cambio de un elemento.
Para acabar se reclaman reemplazos normales para el MG-Bataillon 8, los bersaglieri y la batería de 8'8.
El tiempo corre en nuestra contra, y una idea me viene a la cabeza: usar los AB 40 situados en Tmimi contra la guarnición de Derna. Cierto que los blindados no son lo más adecuado para luchar contra infantería en entorno urbano, pero me decido a afrontar el riesgo.
Perdemos tres elementos, mientras que los hombres de la 9th Australian div. ven reducido su atrincheramiento de 3 a 2. Hacia el suroeste, camuflada en la ladera de la montaña, se vislumbra artillería contracarro de dos libras.
Está claro que se van a necesitar refuerzos, así que desplazo una unidad de M 13/40 y a los Panzer IIIG.
Acciones aliadas:
─ Derna: guarnición y antitanques se enfrentan a la unidad de reconocimiento italiana. Sometida a una dura prueba pierde tres elementos, mientras que causa tres bajas a los primeros y dos a los segundos.
─ Bengasi: los defensores de Barce, en estado de alteración mental a no dudarlo, abandonan sus fuertes posiciones y atacan a los infantes italianos, a los que no hacen ni un rasguño.
Vista global en el mapa estratégico:
En Bengasi los Daimler Dingo han recibido reemplazos. Pronto lamentan su nuevo destino, pues la artillería alemana de 10'5 cm (1) les hace blanco de sus proyectiles hasta generar supresión total.
Toma el relevo el 27º de Brescia. Los británicos pierden un elemento y retroceden...
...poniéndose al alcance de los granaderos, que a costa de dos elementos y sus últimas municiones logran destruirlos.
Se reabastece la batería de 105 mm. y se piden reemplazos para la unidad italiana emplazada en el aeródromo. Esta vez de élite, ya que la tropa ha alcanzado una experiencia de 110 y conviene conservarla.
Alejémonos de la costa y vayamos a la desértica llanura interior.
Nuestra aviación se encuentra plenamente operativa. Sin cazas ni antiaéreos enemigos en la zona puede dedicarse a colaborar en el ataque a tierra.
Los Bf 110D bombardean al 11th prince Albert cav., mas sin resultado.
Sus compatriotas del 18th prince Albert cav. reciben la visita de los Saeta, pero parece que nuestros pilotos no andan muy inspirados y los asiáticos salen indemnes.
El ataque más devastador se efectúa sobre los defensores de Mechili, que sufren el fuego combinado de la escuadrilla de Stuka y las piezas de 15 (1) y 10'5 cm. (2). El atrincheramiento se reduce de 7 a 4, y dos elementos son suprimidos.
Llega el momento de las operaciones terrestres. Rodeamos al 18th prince Albert cav.
Fases del combate:
1.- los M 13/40 encabezan la lucha, provocando dos bajas al adversario y sufriendo una.
2.- los Panzer IIC abren fuego, sin efectividad.
3.- los Panzer IIIG causan cuatro bajas. El enemigo se rinde.
Los restantes tanques de la 132 Ariete se hacen cargo del 11th prince Albert cav. Los destruyen a cambio de un elemento.
Para acabar se reclaman reemplazos normales para el MG-Bataillon 8, los bersaglieri y la batería de 8'8.
El tiempo corre en nuestra contra, y una idea me viene a la cabeza: usar los AB 40 situados en Tmimi contra la guarnición de Derna. Cierto que los blindados no son lo más adecuado para luchar contra infantería en entorno urbano, pero me decido a afrontar el riesgo.
Perdemos tres elementos, mientras que los hombres de la 9th Australian div. ven reducido su atrincheramiento de 3 a 2. Hacia el suroeste, camuflada en la ladera de la montaña, se vislumbra artillería contracarro de dos libras.
Está claro que se van a necesitar refuerzos, así que desplazo una unidad de M 13/40 y a los Panzer IIIG.
Acciones aliadas:
─ Derna: guarnición y antitanques se enfrentan a la unidad de reconocimiento italiana. Sometida a una dura prueba pierde tres elementos, mientras que causa tres bajas a los primeros y dos a los segundos.
─ Bengasi: los defensores de Barce, en estado de alteración mental a no dudarlo, abandonan sus fuertes posiciones y atacan a los infantes italianos, a los que no hacen ni un rasguño.
"No sé lo que hay que hacer, esto no es una guerra".
Lord Kitchener
Lord Kitchener
Re: Panzer Corps.
Turno 11.
Vista global en el mapa estratégico:
Los temerarios defensores de Barce reciben un diluvio de fuego por parte de la artillería del Eje. La atinada dirección de tiro logra acabar con todos. ¡Así se hace!
El 27º de Brescia ocupa la ciudad. Parece que no se interponen más enemigos en la carretera de la costa, así que ordenamos a las baterías que acudan en modo viaje hasta Derna para ayudar en su conquista.
A la vez municionamos a los granaderos y movemos la artillería contracarro hacia Msus, para que se una a las tropas que operan en el interior de la Cirenaica.
Bombas y proyectiles de toda clase castigan a la guarnición de Mechili, provenientes de los Stuka y los cañones de 10'5 y 15 cm. Pierden dos elementos, ven suprimidos seis y lo que es peor, sus defensas son pulverizadas hasta el nivel 1.
El asalto se encomienda al MG-Bataillon 8. La lucha es desigual y expulsa a los indios de la ciudad lamentando una baja por cinco de los contrarios.
No hay piedad para los vencidos. Atrapados entre las montañas, al norte, los bersaglieri (que han tomado la plaza), los M 13/40 y los Panzer IIC, sufren el embate de todos ellos y mueren luchando hasta el último aliento.
Situación final del frente:
Desplazamos los Bf 110D a Derna y atacamos la batería antitanque, provocando una baja.
La escuadrilla de Saeta ametralla el cuartel general de la 9th Australian div., reduciendo el atrincheramiento a 1.
Los Panzer IIIG y los M 13/40 avanzan desde el este y abren fuego. Cuatro elementos australianos perecen, y los supervivientes huyen para salvar el pellejo.
La unidad de reconocimiento transalpina ocupa el aeródromo y dispara sobre la infantería enemiga, sin alcanzarla.
La zona queda así:
Ha sido un turno verdaderamente provechoso, nos hemos apoderado de tres objetivos. La victoria decisiva parece posible.
Vista global en el mapa estratégico:
Los temerarios defensores de Barce reciben un diluvio de fuego por parte de la artillería del Eje. La atinada dirección de tiro logra acabar con todos. ¡Así se hace!
El 27º de Brescia ocupa la ciudad. Parece que no se interponen más enemigos en la carretera de la costa, así que ordenamos a las baterías que acudan en modo viaje hasta Derna para ayudar en su conquista.
A la vez municionamos a los granaderos y movemos la artillería contracarro hacia Msus, para que se una a las tropas que operan en el interior de la Cirenaica.
Bombas y proyectiles de toda clase castigan a la guarnición de Mechili, provenientes de los Stuka y los cañones de 10'5 y 15 cm. Pierden dos elementos, ven suprimidos seis y lo que es peor, sus defensas son pulverizadas hasta el nivel 1.
El asalto se encomienda al MG-Bataillon 8. La lucha es desigual y expulsa a los indios de la ciudad lamentando una baja por cinco de los contrarios.
No hay piedad para los vencidos. Atrapados entre las montañas, al norte, los bersaglieri (que han tomado la plaza), los M 13/40 y los Panzer IIC, sufren el embate de todos ellos y mueren luchando hasta el último aliento.
Situación final del frente:
Desplazamos los Bf 110D a Derna y atacamos la batería antitanque, provocando una baja.
La escuadrilla de Saeta ametralla el cuartel general de la 9th Australian div., reduciendo el atrincheramiento a 1.
Los Panzer IIIG y los M 13/40 avanzan desde el este y abren fuego. Cuatro elementos australianos perecen, y los supervivientes huyen para salvar el pellejo.
La unidad de reconocimiento transalpina ocupa el aeródromo y dispara sobre la infantería enemiga, sin alcanzarla.
La zona queda así:
Ha sido un turno verdaderamente provechoso, nos hemos apoderado de tres objetivos. La victoria decisiva parece posible.
"No sé lo que hay que hacer, esto no es una guerra".
Lord Kitchener
Lord Kitchener
Re: Panzer Corps.
Lo más adecuado sería que el grueso del ejército trace un amplio arco al sur de Bir Hakeim y se dirija a la conquista de los restantes objetivos, Bardia y Sollum.
El Kampfgruppe que ha tomado Bengasi y Barce intentaría hacerse con el aeródromo situado al noreste de Bir Hakeim, para poseer uno lo más cerca posible del frente y que nuestros aviones no tengan que andar esquivando la D.C.A. de Tobruk. A continuación atacaría el oasis.
El éxito de estos planes dependerá de la oposición que se encuentre. No lo averiguaremos, ya que pongo fin aquí al aar. Mi intención no era narrar una partida, sino dar a conocer en profundidad el juego y sus diferentes mecánicas. Creo haberlo logrado, así que paso a la...
Valoración final.
“Panzer Corps” es un juego de guerra táctico “ligero”. No se tiene en cuenta la moral ni la cohesión de la tropa, no hay líneas de aprovisionamiento. El reabastecimiento, los reemplazos, los desembarcos... Todo se ha simplificado al máximo.
Por ello mismo resulta muy sencillo hacerse con él. Dominarlo y conseguir la victoria, sobre todo la decisiva, es otra cuestión. Hay que trazar estrategias adecuadas y llevarlas a cabo sabiamente. El uso correcto de la doctrina de armas combinadas es vital. Se deben conocer a fondo nuestros puntos fuertes y débiles y los del enemigo, y actuar en consecuencia.
La idea de las unidades nucleares, que te acompañan de un escenario a otro adquiriendo experiencia y mejorando, es muy afortunada. Hace que te encariñes con tus hombres y los cuides. El triunfo dependerá en gran parte de ello.
Hemos visto cómo en más de una ocasión la inteligencia artificial ha actuado a lo loco, abandonando posiciones fuertes y atacando en inferioridad de condiciones. Sería deseable que fuese algo mejor. Aun así se ha mostrado un oponente digno, capaz de hacer que la partida sea un reto. Cierto que existe multijugador, pero este tipo de wargames se suele jugar sobre todo en solitario.
Algo que se puede achacar al “Panzer Corps” es un excesivo conservadurismo dentro del género. Cualquiera que haya disfrutado del primer “Panzer general” podría utilizarlo sin problemas. Hasta la interfaz es muy similar. Otros miembros de la misma familia han innovado otorgando distintas habilidades a cada tipo de artillería, aumentando la versatilidad de las fuerzas de ingenieros, limitando los puntos donde se pueden desplegar nuevas unidades...
En conjunto se trata de un producto notable, muy entretenido, que nos obligará a pensar y con el que se nos pasará el tiempo diciendo “solo un turno más”. La gran cantidad de expansiones asegura horas y horas de diversión, y el que en ocasiones se pueda elegir luchar una batalla u otra según nuestros logros aumenta la rejugabilidad.
El Kampfgruppe que ha tomado Bengasi y Barce intentaría hacerse con el aeródromo situado al noreste de Bir Hakeim, para poseer uno lo más cerca posible del frente y que nuestros aviones no tengan que andar esquivando la D.C.A. de Tobruk. A continuación atacaría el oasis.
El éxito de estos planes dependerá de la oposición que se encuentre. No lo averiguaremos, ya que pongo fin aquí al aar. Mi intención no era narrar una partida, sino dar a conocer en profundidad el juego y sus diferentes mecánicas. Creo haberlo logrado, así que paso a la...
Valoración final.
“Panzer Corps” es un juego de guerra táctico “ligero”. No se tiene en cuenta la moral ni la cohesión de la tropa, no hay líneas de aprovisionamiento. El reabastecimiento, los reemplazos, los desembarcos... Todo se ha simplificado al máximo.
Por ello mismo resulta muy sencillo hacerse con él. Dominarlo y conseguir la victoria, sobre todo la decisiva, es otra cuestión. Hay que trazar estrategias adecuadas y llevarlas a cabo sabiamente. El uso correcto de la doctrina de armas combinadas es vital. Se deben conocer a fondo nuestros puntos fuertes y débiles y los del enemigo, y actuar en consecuencia.
La idea de las unidades nucleares, que te acompañan de un escenario a otro adquiriendo experiencia y mejorando, es muy afortunada. Hace que te encariñes con tus hombres y los cuides. El triunfo dependerá en gran parte de ello.
Hemos visto cómo en más de una ocasión la inteligencia artificial ha actuado a lo loco, abandonando posiciones fuertes y atacando en inferioridad de condiciones. Sería deseable que fuese algo mejor. Aun así se ha mostrado un oponente digno, capaz de hacer que la partida sea un reto. Cierto que existe multijugador, pero este tipo de wargames se suele jugar sobre todo en solitario.
Algo que se puede achacar al “Panzer Corps” es un excesivo conservadurismo dentro del género. Cualquiera que haya disfrutado del primer “Panzer general” podría utilizarlo sin problemas. Hasta la interfaz es muy similar. Otros miembros de la misma familia han innovado otorgando distintas habilidades a cada tipo de artillería, aumentando la versatilidad de las fuerzas de ingenieros, limitando los puntos donde se pueden desplegar nuevas unidades...
En conjunto se trata de un producto notable, muy entretenido, que nos obligará a pensar y con el que se nos pasará el tiempo diciendo “solo un turno más”. La gran cantidad de expansiones asegura horas y horas de diversión, y el que en ocasiones se pueda elegir luchar una batalla u otra según nuestros logros aumenta la rejugabilidad.
"No sé lo que hay que hacer, esto no es una guerra".
Lord Kitchener
Lord Kitchener