TURNO 3 (1528-1531)
Juan Ruiz - Arcipreste de Hita
"Libro del Buen Amor"
(Fragmento)
De la pelea que ovo don Carnal con la Quaresma.
Açercándose viene un tiempo de Dios santo,
fuime para mi tierra por folgar algún rato,
dende a siete días era Quaresma tanto
puso por todo el mundo miedo e grand' espanto,
Estando a la mesa con don Jueves Lardero,
truxo a mí dos cartas un ligero trotero,
desirvos he las notas, ser vos tardinero,
ca las cartas leídas dilas al mensagero.
«De mí, Santa Quaresma, sierva del Salvador,
»enviada de Dios a todo pecador,
»a todos los arçiprestes et clérigos con amor,
»salud en Jesu Christo fasta la pasqua mayor.
»Sabed, que me dixieron, que ha çerca de un año,
»que anda don Carnal sañudo muy estraño
»astragando mi tierra, fasiendo mucho daño,
»vertiendo mucha sangre de lo que más me asaño:
»Et por esta rasón en vertud de obediençia
»vos mando firmemente so pena de sentençia,
»que por mí e por mi ayuno e por mi penitençia,
»que lo desafiedes con mi carta de creençia.
»Desidle de todo en todo, que de hoy siete días
»la mi persona mesma, e las compañas mías
»iremos pelear con él, e con todas sus porfías,
»creo que se me non detenga en las carneçerías.
»Dadla al mensajero esta carta leída,
»liévela por la tierra, non la traya escondida,
»que non diga su gente, que non fue aperçebida:
»dada en Castro de Ordiales, en Burgos resçebida.»
Otra carta traía abierta e sellada,
una concha muy grande de la carta colgada,
aquél era el sello de la dueña nombrada;
la nota es aquésta, a don Carnal fue dada:
«De mí doña Quaresma, justiçia de la mar,
»algoaçil de las almas, que se an de salvar,
»a ti Carnal goloso, que te non coydas fartar,
»envíote el ayuno por mí desafiar.
FASE DIPLOMATICA
"El combate entre don carnaval y doña cuaresma", de Pieter Brueghel el Viejo
Hacía tiempo que no se recordaba un carnaval así, seguramente desde el año 1458, cuando en Enero un decreto del Consejo, tuvo que prohibir a los hombres la entrada en los monasterios, disfrazados de mujeres.
Nos encontramos en martes de carnaval del año 1528, para ser más precisos a 3 de febrero. Todo Venecia es una fiesta, una orgia, un desenfreno general recorre las calles y canales de Venecia, no hay casa, palacio o calle que no esté de fiesta.
Anonimo - "Il Carnevale di Venezia" - engraving (1757)
Tan sólo hay un lugar vacío en la ciudad, a donde nadie dirigiría sus pasos o dignaría a prestar atención hasta el día siguiente, el miércoles de ceniza: Por esa razón el Dux de Venecia, anfitrión del cónclave, había elegido ese emplazamiento para la reunión entre el embajador de Francia y el representante Turco.
La Serenisima, aseguraba la protección de las dos embajadas tanto en su territorio como garantizaba el transporte en sus naves de las dos delegaciones, tanto a la ida como a la vuelta.
Si bien la Serenísima de momento era neutral en la guerra abierta a la que estaba sometida Europa, eso no quería decir, que como siempre, no intentase sacar tajada como buen comerciante que en momentos de crisis ve oportunidades de negocio.
Venecia por una parte había conseguido del Turco, que sus corsarios acosaran al Papado (rival en Italia) y a España (el Imperio era demasiado poderoso a ojos venecianos) y que dejará en paz a sus posesiones y del Francés había obtenido por una parte que molestara al Papa lo máximo posible y que por otra se comprometiera a no seguir avanzando en Italia hacia su zona de influencia.
Gentille Bellini
La negociación fue todo un éxito, El Turco cedería 50 galeras a Francia para garantizar el dominio del Mediterráneo Occidental a esta nación, ya que sumaba a dicha flota, las 50 francesas y las 25 de Génova, al mando de Andrea Doria. Así mismo ambos países suministrarían a las tropas del otro país que tuvieran que trasladarse por territorio del otro. La cosa pintaba bastante bien para sus planes, ya que Carlos V, se vería abocado a una guerra en dos frentes muy alejados unos de otros y debería dividir sus esfuerzos.
Ambas delegaciones, una vez acabado el trabajo, se pusieron sus máscaras y disfrutaron de carnaval, lo que sus respectivas religiones y conciencia les permitió.
...Pero la sombra de Pedro es alargada y nadie notó al día siguiente en falta a un joven novicio, llegado hacia unos meses de Chipre…