[Por Javier Nicolás] Mi sorpresa fue mayúscula viendo al mismo Almirante abriendo la puerta. Esperaba encontrarme con alguna enfermera o señora de compañía, pues tenía noticias del delicado estado de salud del antiguo Comandante de la flota de submarinos alemanes, posteriormente de la Kriegsmarine y Jefe de Estado como sucesor de Hitler en 1945.
Señor Dönitz, me gustaría conocer su opinión, hoy, sobre Hitler.
-Como militar, creo que Hitler fue un genial estratega. Poseía una sorprendente formación castrense que se debía en parte a su participación en la IGM, pero sobre todo, a su decidida voluntad de convertirse de forma autodidacta en un perfecto soldado, lo que consiguió con innumerables horas de lectura y estudio del pasado.
Todo lo que Hitler se proponía lo ponía en marcha con férrea voluntad y un gran sentido de cumplimiento del deber y servicio a la comunidad.
Él mismo puso en práctica una nueva ética del trabajo basándose en la idea de que cada cual dentro de la comunidad debe ser consideado según su propia valía personal, su carácter y fuerza de voluntad, y no, como ocurre en las democracias, en el poder del dinero y las influencias. Y lo que es más importante, consiguió contagiar este espíritu tanto al Ejército, como al pueblo y al partido nacionalsocialista.
En lo concerniente a cuestiones puramente militares, o incluso de tácticas de guerra en el mar, era sorprendente su profundo conocimiento del tema. Debo decir que yo mismo me vi muy a menudo superado por su dominio de cuestiones de armamento submarino y nuevas formas de guerra marítima.
Gran Almirante, ¿cree usted, como se ha dicho repetidas veces, que Hitler fue el culpable exclusivo de la guerra?
-No. Creo que la guerra empezó ya en 1919 con la imposición del infame Tratado de Versalles. Póngase usted en la situación de cualquier alemán en esos años de crisis e inflación, en los que Alemania quedó reducida, tanto geográfica, como económica y moralmente a la más ínfima expresión y de la forma más humillante. Y ahora dígame, ¿no pensaría que es una injusticia? Pues bien, creo que Hitler y su movimiento fueron un hecho, algo que tuvo la necesidad de crecer y desarrollarse en esta situación desesperante para nuestra patria.
En mi familia, de tradición prusiana, siempre habíamos admirado las gloriosas hazañas de nuestro pueblo a lo largo de la Historia y en aquel momento llorábamos de desesperación y de rabia por lo que estaba pasando.
Hitler fue uno más de los que se dieron cuenta del verdadero problema. Y con su genialidad innata llevó a los demás a rebelarse contra este sistema infamante. Una vez llegado al poder en 1933, Hitler no pretendió nunca la guerra con Occidente -las repetidas proposiciones de paz a Inglaterra durante la contienda son una prueba evidente-, sino que como ya expresaba en su MK, la gran guerra ideológica debía dirigirse contra Oriente, es decir, contra el comunismo.
Las grandes adhesiones populares de los Sudetes, el Sarre o Austria son ejemplos que hablan por sí solos. Hitler no quiso la guerra, esta fue provocada por las potencias occidentales. Yo mismo me quedé muy sorprendido cuando Francia e Inglaterra declararon la guerra a Alemania en 1939.
¿A qué causas atribuiría usted la derrota alemana en 1945?
-Fueron muchos factores. La guerra fue un forcejeo contínuo entre la capacidad y espíritu de lucha del Ejército alemán y las cantidades ingentes de material de guerra aliado, su combustible y su dinero. Stalingrado supuso, más que una derrota definitiva sobre la Wehrmacht, una fuerza moral para las tropas aliadas, ya cansadas de batallar sin un éxito concreto y definitivo. A partir de 1943, la guerra empezó a decantarse del lado aliado, de forma lenta pero cada vez más insuperable por nuestros esfuerzos. De todas formas, siempre hubo una nueva oportunidad para las nuevas armas nacionalsocialistas, y un nuevo hálito de victoria.
El proceso fue lento y afectó a todos los frentes. Nuestra fuerza naval se veía privada de barcos y submarinos y la Luftwaffe no lo pasaba mejor. Sobre todo, se hizo notar de forma acuciante la falta de combustible para poner en marcha los carros de combate y aviones que se producían en los años finales en cantidades que triplicaban las del inicio de la guerra. Con la entrada de América en la guerra, Alemania debió cargar con un enemigo de potencial industrial y económico gigantesco que se haría, con sus envíos de material bélico a la URRS, y los bombardeos terroristas sobre Europa, casi insoportable.
¿Qué misión concreta tuvo durante los últimos meses de guerra?
-Casi al final reinaba un caos terrible. En enero de 1945, estando yo encargado de toda la zona norte de Alemania, me ocupé principalmente de asegurar, mediante el transporte por barco, la evacuación de la población del este de Europa, ante el incontenible avance de las tropas rusas. Me propuse, ante todo, salvar el mayor número de población, pues sabíamos cómo eran tratados los prisioneros que caían en manos de los rusos. Di orden de acelerar al máximo la operación de escape y pusimos a disposición de la misma todos los buques y cualquier tipo de embarcación que flotara. De este modo, conseguí que mucha gente pudiese llegar a la parte occidental de Europa.
¿De qué modo recibió usted la orden de sucesión como Jefe de Estado en Alemania?
-Bueno, en aquellos días de abril de 1945, reinaba por todas partes el nerviosismo y la incertidumbre. Yo había hablado días antes con Himmler, que se mostraba muy cauteloso. Asímismo me enteré también de que el Führer había quitado su sucesión a Göring, y que el próximo candidato era, pues, el jefe supremo de las SS, Heinrich Himmler. Sin embargo, cuando la tarde del 30 abril de 1945 –día en que murió Hitler, aunque yo no me enteré hasta más tarde- me entregaron una comunicación por radiograma en la que se me nombraba sucesor de Hitler, mi sorpresa fue total. Me quedé realmente asombrado, ya que nunca se me ocurrió que pudiera escogerme como su sucesor, más aún cuando tenía a su lado a los más fieles seguidores: Bormann, Goebbels, Himmler… Más tarde pensé que la elección se basó en que Hitler quiso que su sucesor fuera un militar en aquel momento, dado que la solución más importante era entonces de índole militar. Pese a todo, el Canciller nombrado por Hitler como sucesor fue el Dr. Goebbels.
Más tarde, como explico en mis memorias, Speer me dijo en 1946 que él fue causante directo de mi elección, ya que se hallaba presente cuando Hitler hizo el testamento, y Speer mencionó mi nombre como sucesor.
Lo primero que hice como Jefe de la Nación, fue un balance de fuerzas que nos quedaban, y a la vista de los hechos –sobre todo la falta de víveres y combustible y la arrolladora fuerza aliada- decidí que sólo nos quedaba la capitulación. Pero yo quería para Alemania una capitulación honrosa, no una repetición de Versalles. Sin embargo, el comportamiento del enemigo no fue, salvo algunas excepciones, nada noble. El burdo proceso de Nuremberg fue una prueba –otra- del trato ignominioso que el vencedor dio al vencido. Nadie quiso acordarse del trato que Alemania dispensó a Francia en 1940.
Para terminar, Sr. Dönitz, ¿Cree todavía en la vigencia del Nacionalsocialismo?
-En buena parte sí. La situación actual de Alemania y Europa se parece a la de los años 20 y 30, pero con una diferencia fundamental: antes existía amor a la patria y al ideal, hoy día sólo existe el amor por las cosas materiales. Por eso, creo que sí serían útiles muchas de las ideas del Nacionalsocialismo, aunque el poder enemigo es mucho mayor y haría muy difícil ponerlas en práctica.
El Gran almirante se sentía cansado y no quise proseguir con esta charla amistosa. A los 89 años se busca ante todo la tranquilidad.
Verano de 1980.
Entrevista a Dönitz. Muy interesante.
-
- Regular - Oberfeldwebel
- Mensajes: 630
- Registrado: 17 Oct 2004, 17:52
Entrevista a Dönitz. Muy interesante.
Con esto queda claro que, efectivamente, Dönitz fue uno de los nazis más convencidos y mantuvo sus ideas hasta su muerte.
- Erwin
- Crack - Oberst
- Mensajes: 4722
- Registrado: 02 Dic 2004, 17:15
- STEAM: Jugador
- Ubicación: Viendo el canal PdL en Youtube
Re: Entrevista a Dönitz. Muy interesante.
Personalmente el Nacionalsocialismo me parece una aberración.
Solo hay que ver las victimas de la II GM.
Y tratar de que en 1980 siga teniendo vigencia no me convence en absoluto.
Parece sacado de algún sitio revisionista.
Saludos
Solo hay que ver las victimas de la II GM.
Y tratar de que en 1980 siga teniendo vigencia no me convence en absoluto.
Parece sacado de algún sitio revisionista.

Saludos
- Kal
- Support-PdL
- Mensajes: 9332
- Registrado: 09 Jul 2005, 19:35
- STEAM: Jugador
- Ubicación: En la Inopia.
Re: Entrevista a Dönitz. Muy interesante.
Interesante, cierto, aunque también es patético comprobar como a los 89 años aún no había aprendido a reconocer la maldad intrínseca de un régimen basado en el miedo, la aniquilación del adversario y la megalomanía de cuatro manipuladores encumbrados por la violencia. Podía haber dedicado una palabra a todos los que murieron por no tragar con esa rueda de molino o símplemente por pertenecer a determinados grupos, etnias, razas, padecer enfermedades o por capricho de los todopoderosos energúmenos que florecieron en su tierra como champiñones al calor del rencor y los delirios de grandeza.
Un asco.
Me quedo con sus escritos sobre submarinos. El resto de su propaganda me da nauseas.
Un asco.
Me quedo con sus escritos sobre submarinos. El resto de su propaganda me da nauseas.
One lovely morning about the end of april 1913, found me very pleased with life in general...
- Erwin
- Crack - Oberst
- Mensajes: 4722
- Registrado: 02 Dic 2004, 17:15
- STEAM: Jugador
- Ubicación: Viendo el canal PdL en Youtube
Re: Entrevista a Dönitz. Muy interesante.
Amén.Kal escribió:Interesante, cierto, aunque también es patético comprobar como a los 89 años aún no había aprendido a reconocer la maldad intrínseca de un régimen basado en el miedo, la aniquilación del adversario y la megalomanía de cuatro manipuladores encumbrados por la violencia. Podía haber dedicado una palabra a todos los que murieron por no tragar con esa rueda de molino o símplemente por pertenecer a determinados grupos, etnias, razas, padecer enfermedades o por capricho de los todopoderosos energúmenos que florecieron en su tierra como champiñones al calor del rencor y los delirios de grandeza.
Un asco.
- Yurtoman
- Crack - Oberst
- Mensajes: 4928
- Registrado: 21 May 2003, 12:38
- STEAM: Jugador
- Ubicación: A orillas del Úadi Al Kabir, kúrab de Ishbiliya.
Re: Entrevista a Dönitz. Muy interesante.
Gran estratega??
Está hablando del mismo Adolfo?
Saludos. Yurtoman.
Está hablando del mismo Adolfo?

Saludos. Yurtoman.

-
- Regular - Oberfeldwebel
- Mensajes: 630
- Registrado: 17 Oct 2004, 17:52
Re: Entrevista a Dönitz. Muy interesante.
A mí me ha sorprendido, aunque también lo sospechaba. Se dice que Dönitz era uno de los nazis más convencidos dentro de la jerarquía del Reich, pero en 10 años y 20 días, parece "arrepentido", aunque con los típicos tópicos "no sabía nada", "me limité a cumplir con mi deber", etc... se ve que tuvo que poner el discurso de siempre para que le pudieran publicar las memorias. Parece que cuando uno está al final de su vida, le da igual 8 que 80 y dice las cosas tal como las siente.
- Yurtoman
- Crack - Oberst
- Mensajes: 4928
- Registrado: 21 May 2003, 12:38
- STEAM: Jugador
- Ubicación: A orillas del Úadi Al Kabir, kúrab de Ishbiliya.
Re: Entrevista a Dönitz. Muy interesante.
Menos mas que Adolfo no le consiguió mas de sus U-Boots, sino puede que estivieramos hablando teutónn.
Saludos. Yurtoman.

Saludos. Yurtoman.

Re: Entrevista a Dönitz. Muy interesante.
Aqui podemos ver como se forjaban sus grandes dotes de Gran estratega
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=ct86sx7wdW8[/youtube]

[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=ct86sx7wdW8[/youtube]

- Ignikharion
- Conscript - Obergefreiter
- Mensajes: 256
- Registrado: 07 Dic 2008, 01:15
Re: Entrevista a Dönitz. Muy interesante.
Pero que película más buenaKIM escribió:Aqui podemos ver como se forjaban sus grandes dotes de Gran estratega![]()

- Kal
- Support-PdL
- Mensajes: 9332
- Registrado: 09 Jul 2005, 19:35
- STEAM: Jugador
- Ubicación: En la Inopia.
Re: Entrevista a Dönitz. Muy interesante.
U-HUUU



One lovely morning about the end of april 1913, found me very pleased with life in general...