Después de varias partidas PBEM, siempre jugando a la campaña completa con otros tantos jugadores, ya estaba algo frustrado porque invariablemente al cabo de no más de 20 turnos mis contrincantes perdían el contacto conmigo sin motivo aparente. Así que se me ocurrió solicitar algún oponente para jugar a un escenario corto, en concreto el East 1862. Para mi sorpresa conocí a un jugador que es la delicia de cualquier PBEM, Oldman. Un caballero formal que envías sus órdenes a un ritmo de 3-4 turnos a la semana pero flexible en cuanto a días, faltas por vacaciones y que siempre avisa si se va a retrasar por el motivo que sea. Por si todo esto no es bastante es un gran conocedor del juego y todas sus claves.
Mi desidia y desgana con que empecé a jugar me hizo no planificar con el detalle que a mi me gusta, pero eso no es excusa, ya que Oldman, con gran dominio de la estrategia de la defensa y contraataque propia del buen jugador CSA me superó en todo. Creo que con una imagen se resume mejor
Cierto que logré sorprenderle en Norfolk e incluso al final lancé un ataque a Richmond, pero las cuentas están claras, el doble de bajas y la moral al límite del KO. Eso sí, para los graciosos del juego la partido se perdió a los puntos. De chiste.
