Puesto que el combate tiene lugar durante la noche y las imágenes pueden ser muy oscuras, he retocado algunas para darles más brillo y hacerlas más visibles. No obstante la oscuridad que algunas imágenes emanan es la realidad del combate nocturno en AP:OS: oscuridad y necesidad de estar atento a cualquier ruido o movimiento. Tensión y dudas, muchas dudas.
El lugar que defienden mis tropas es un cruce de caminos importante al suroeste de
Taranovka, junto a un pueblo ruso. Se desconoce exactamente en qué dirección vendrá el enemigo ya que excepto por el oeste de su posición el resto de direcciones están controladas por los rusos.
Intentar cubrir todos los frentes sin saber a qué atenernos es una locura así que la idea es intentar tener a las Compañías cerca del objetivo que defienden. La Compañía de intendencia se atrincherará muy cerca del objetivo. El resto de Compañías las he dispuesto a lo largo de la carretera que atraviesa el pueblo con arcos de cobertura y de alcance muy cortos, con órdenes de no disparar hasta nuevo aviso. Parto del supuesto que el enemigo dispone de tanques así que mi intención es no revelar mis posiciones hasta que estén encima, aprovechando así el efecto sorpresa y poder maximizar el uso de granadas y explosivos contra los tanques.
El hecho de no saber por dónde vendrá el enemigo es un dolor de cabeza así que tengo que tener mucho cuidado y reaccionar rápido si surgen imprevistos. Estoy aprovechando la maleza y los accidentes naturales del terreno para ocultarme, además de que el ataque se está produciendo a las 4 de la madrugada con lo que la visibilidad es muy baja. Está nevando, aunque no copiosamente. Hace mucho frío, unos -25 grados bajo cero. En estas condiciones tan precarias y cogidas con pinzas, me dispongo a aguantar el ataque comunista.
Esta imagen de arriba muestra la disposición final de mis fuerzas con el objetivo (bandera alemana) situado en el pueblo, que bordea la larga carretera. Excepto por el oeste (a la izquierda de la imagen) el resto de direcciones están controladas por los rusos y el ataque puede venir desde cualquier sitio, incluso es muy posible que desde varios a la vez.
Al poco de situar a las fuerzas se oye al sur de la imagen anterior un potente ruido de motores y ruido de cadenas: se confirma que los rusos traen tanques. Mal asunto. De momento sólo tengo una orientación sonora, no hay contacto visual pero el ruido procede del sur, en una pequeña zona boscosa que bordea la carretera y el cruce de caminos. Al poco el silencio vuelve roto únicamente por el aullido de algún perro salvaje.
Súbitamente se oyen truenos a lo lejos, dirección indeterminada. La artillería rusa entra en acción, es una descarga poco intensa y el calibre no parece muy grande (82 o 100mm). Las salvas caen muy cerca de las trincheras de la Compañía de intendencia, a la izquierda del objetivo. Por suerte no causa heridos ni daños, es una descarga muy intermitente y de baja intensidad que dura un par de minutos pero que levanta largos penachos de barro y hielo. El polvo estará unos minutos sobrevolando las casas rusas.
De pronto, ¡sorpresa! Por el lugar que menos me esperaba se detecta un contacto. Infantería rusa avanzando por el noroeste, justo en el sentido y al lado contrario de donde se han oído los tanques enemigos.
Se oyen gritos y disparos, los Karsk petardean. Truenan las SMGs rusas y los contactos se multiplican.
La zona boscosa se ilumina con trazadoras y fuego de fusilería. Es un espectáculo de luces y cacofonía que rompe y rasga la noche.
Apenas dura un par de minutos, un juego de luces fantasmal. He tenido que cancelar los arcos de cobertura y anular la orden de no disparar ya que los rusos prácticamente han aparecido encima y no quiero que las SMGs rusas se ceben. El combate se salda con un pelotón ruso aniquilado y varias bajas alemanas, apenas un minuto o dos de descargas a distancias extremadamente cortas. No se detecta más tropas rusas, parecía un pelotón de exploración o en labores de reconocimiento.
Mi compañía más al norte ha expuesto su posición pero ahora la acción vuelve a centrarse donde se habían oído los tanques hace unos minutos.
Estos están avanzando y ya están a la vista. Se trata de tanques modelo Mark II Matilda (tanques británicos, ayuda llegada a través de Murmansk). Hay al menos un pelotón de tanques, unos 4 tanques como mínimo y seguramente más que todavía no se pueden apreciar.
En vez de avanzar en columna por la carretera estos vienen desplegados en línea y por el lado izquierdo de la misma, directos hacia donde mi compañía está emboscada en la arboleda. Mis soldados susurran “¡Achtung Panzer!” entre ellos mientras el ruido de los motores se acerca inexorable. Las cadenas de los Matilda levantan barro congelado y dejan profundos surcos en la nieve.
Los tanques van directos hacia mis soldados, están ya muy cerca. Se aprecian soldados rusos apoyando el avance, puede ser una gran oportunidad de causar daños al enemigo. Los Valentine encienden las luces de posición traseras, de un rojo oscuro, seguramente para que la infantería rusa sepa dónde está cada uno de los tanques y evitar desgracias innecesarias.
Los tanques ya están prácticamente encima de mis tropas, así que ordeno atacar con toda la Compañía. El bosque estalla en una furia de disparos, explosiones, gritos y con el ruido de los tanques y sus estridentes cadenas.
