
Se puede decir que en este turno es cuando me doy cuenta que he estado cometiendo muchos errores aunque no tan graves como para perder la partida de forma inmediata o hacer algo que me deje en estado catatónico. En este juego no puedo uno ir a medias tintas con nada, hay que lanzarlo todo en las ofensivas una vez se empieza y al menos intentarlo con todo lo que uno tiene a mano. He pasado muchos turnos estrellándome en situaciones donde los ratios eran muy 1 a 1 o en ataques muy previsibles y así no voy a ningún lado. Me puedo excusar sin duda en que es mi primera partida y por tanto me faltaba visión de conjunto, no conocía algunos pequeños detalles (y otros no tan pequeños) que podrían haberme ayudado a trazar mejor mis planes, como el haber controlado la costa belga para usar ataques sobre tierras británicas para reducir la moral.
Tampoco he sacado ningún rendimiento del transporte estratégico para desplazar Cuerpos y Ejércitos de un frente a otro en un turno, algo que es muy útil cuando el desplazamiento real por tren es superior a los 15 días. El movimiento estratégico permite mover un Cuerpo/Ejército de un lugar alejado a otro en 15 días, lo que asegura que al final del turno esa agrupación esté donde uno quiere. Esto permite ganar mucho tiempo, sobre todo teniendo en cuenta las grandes distancias que hay entre algunos frentes. Esto es así en el territorio turco sobre todo, donde su gran extensión y la presencia de tantas montañas convierten algunos viajes por tren en largas travesías que pueden llevar entre 2 y 3 turnos, así como moverse del frente ruso al occidental (o al revés). Ganar uno o un par de turnos es mucho en este juego, sobre todo cuando se quiere reaccionar ante una ofensiva enemiga o se quiere realizar un ataque sorpresa sobre un sector concreto.
De momento lo que hago en este turno es replantearme muchas cosas y aceptar que así no voy a ningún lado. Estoy tapando huecos pero no estoy atacando con fuerza en ningún lado y esto no puede seguir así. Decido empezar los cambios con los turcos, donde tengo grandes cantidades de tropas enfangadas en el Cáucaso, y desplazo a Sanders Pasha hacia allí para tomar las riendas de las enormes fuerzas que tengo en la zona.

Es un líder militar de primera para lo que es la oficialidad turca pero como veis se trata de un general alemán, lo que explica sus valores. Lo he sacado de Gallipoli y lo he enviado hacia el Cáucaso porque el resto de oficiales turcos que tengo no se ponen activos casi nunca por sus bajos valores estratégicos y así no puedo hacer nada. Ahora se encargará de realizar una ofensiva hacia territorio ruso aprovechando que sus niveles le permiten activarse con regularidad, además de que es un mando muy competente en general. A simple vista mi Ejército en conjunto es superior al ruso en potencia de combate en casi 2 a 1 pero es de suponer que los rusos tienen tropas adicionales que no vemos en territorios adyacentes, especialmente en la retaguardia, así que no puedo quedarme con la primera impresión visual. Como no lo sé y no lo puedo descubrir a pesar de tener globos de observación por la zona, me la jugaré y realizaré un fuerte ataque a ver con qué me encuentro.
De este combate puedo sacar muchas conclusiones y realizar muchas acciones de cara a los siguientes turnos. Por ejemplo, si el ruso resiste al menos podré ver de cuántas tropas cuentan y decidir si vale la pena enviar más tropas para seguir presionando o es mejor enviar las fuerzas turcas aquí presentes hacia otros puntos donde puedo hacer de ellas un mejor uso. Si gano pues seguiré empujando pero si pierdo al menos podré emplear mejor mis fuerzas que tenerlas aquí sin hacer nada. Digamos que voy a empezar a buscar un mejor uso a mis fuerzas y dejar de tenerlas cruzadas de brazos.
Uno de los frentes que podría reforzar con las tropas turcas del Cáucaso es el palestino, que está muy tranquilo.

Presionar aquí no conseguiría más que atraer la atención del británico, quizás obligarle a enviar refuerzos para aligerar el frente occidental por ejemplo.
En los Balcanes la situación se ha bloqueado, al menos temporalmente.

Excepto el movimiento de un Cuerpo búlgaro para tomar Pristina, poco más.
Donde voy a concentrar esfuerzos es en frenar el ataque rumano/ruso hacia la frontera austrohúngara, donde mi rival atacó con fuerza en el turno anterior asediando dos ciudades estratégicas importantes.

Voy a intentar levantar el asedio de Sibiu con un ataque de un Ejército austrohúngaro que se moverá por tren desde el frente serbio y con varios Cuerpos como apoyo. Si sale bien luego intentaré romper el otro asedio.
La siguiente imagen del frente ruso presenta pocas novedades, no hay por donde romper en la situación actual a no ser que haga algo que me permita concentrar muchas fuerzas en un punto y romper el frente.

En el frente occidental el informe que indicaba que había un ataque francés previsto hacia Saarburg resulta ser falso.

En la imagen se aprecia mi reacción y el movimiento de fuerzas que el falso reporte provocó. Al menos he conseguido un mejor equilibrio de fuerzas, en apariencia.
La extraña desaparición de fuerzas francesas me hace pensar si no era una información falsa o si se han movido hacia otro lugar. ¿Quizás al frente italiano?

Sinceramente, la exploración es importante en este juego pero tiene sus limitaciones y no se alcanza a ver mucho más allá del frente. Mi rival dispone de varios espías y eso le ayuda a tener mejor imagen de la situación de mis fuerzas así que parto con desventaja.
En este turno me sale la opción de poder utilizar a un ingeniero de artillería que me permitiría obtener una ganancia importante en tecnología de artillería.

También empieza a tener efecto la guerra del Rif, evento que activé en el turno anterior.

Sus efectos ya están operando sobre territorio marroquí.

A nivel tecnológico empiezan a surgir algunas diferencias visibles en los respectivos avances, seguramente producto de eventos e inversiones que han permitido tomar esta ventaja.

Tendré que echar un ojo a esto y mirar de no quedar muy atrás en algunas tecnologías clave.
A nivel de producción invierto de nuevo en infantería austrohúngara y en reemplazos.

Puntuación.

De momento sigo con la impresión de que las cosas están al límite en todas partes, tengo que hacer un mejor uso de mis fuerzas y emplearlas en objetivos concretos, aunque sea durante unos pocos turnos. Debo conseguir algunos éxitos parciales para presionar a mis rivales, especialmente al jugador ruso, y eso requiere que emplee mejor mis opciones y mis fuerzas. Al menos empiezo a sentirme más cómodo con las situaciones pero no por ello es más fácil saber qué hacer y cómo. Tengo que sacar fuerzas de algún lado y concentrarlas en otro sin provocar desequilibrios y a la vez debo cubrir varios frentes secundarios intentando contraatacar, como en este turno contra los asedios de rusos y rumanos, sin dejar que los serbios me hagan un traje por la espalda si ven la oportunidad de cruzar el río. Y luego hay el nuevo frente italiano que como veremos va a tener movimiento en breve…
En fin, que la WWI fue una guerra de posiciones y trincheras pero el jugador no tiene esa sensación de “frente estático” porque continuamente se están moviendo Cuerpos y Ejércitos para tapar agujeros o fortalecer frentes. Como veremos en los próximos turnos, los movimientos masivos de fuerzas y basculación de fuerzas de un frente a otro va a ser una constante y un elemento clave para las Potencias Centrales.