Algo así como el WitpAE o un escenario con mapa enorme y miles de fichas estilo Panzer Campaigns Kusk.
Hace muchos años me encantaban estos juegos, en mi vida de estudiante y soltero abundaban las horas y escaseaba el dinero. Así que una vez uno compraba un juego lo interesante era quitarle rendimiento.
El wargame al que más horas le he metido fue Steel Panters, al que en los años 90 jugué múltiples campañas cubriendo la guerra completa. Calculo miles de horas, las seis mil pesetas mejor invertidas en ocio de mi vida.
En la ultima decada accedí a esos juegos inmensos de Gary Grigsby, juegos que encarnaban el sueño de mis inicios wargameros, conseguí completar el Uncommon Valor, en el Wite y el Witp fracasé. Nunca he conseguido pasar del 42 en Rusia ni en el Pacífico.
No porque no me gusten, me encantan, pero siempre otros juegos me llaman y me distraen. Me digo, "dejo un poco el Wite y pruebo esto y luego vuelvo".
Pero al final no vuelvo, por que cuando lo intento he perdido el hilo de la partida y la inmersión.
Y me deprimo, por mi inconstancia. Aunque soy consciente de que ahora tengo familia, trabajo, menos tiempo y a mayores lo peor es esa incesante catarata de nuevos juegos que se meten por los ojos y me llaman.
Estoy saturado.
Que triste no?
Que hubiese pasado si hubiese tenido algo como el Wite en 1998? Seguro que habría llegado a 1945.
Se me viene a la cabeza el refranero, "Dios le da pan al que no tiene dientes" y sobre todo ese de "El que mucho abarca poco aprieta"

Esto es una pequeña reflexión personal, pero voy a intentar extrapolarla.....
¿Creeis que con la actual avalancha de juegos sigue habiendo un futuro para juegos tan demandantes de horas como los Monsters? ¿Tiene sentido comprarlos si en el fondo sabes que nunca llegarás a jugarlos completos como se merecen?
¿O están condenados a desaparecer?
Asumiendo que nunca se disfruta tanto un wargame como cuando juegas contra otra persona. ¿No será cada vez más complicado encontrar rivales dada la enorme cantidad de juegos y la fragmentación consiguiente?
Ahí dejo esas preguntas.