(Para los observadores: falta un turno, el 22. La explicación es simple: cada turno es bastante complicado de jugar, hay que ir con cuidado de que no se te mezclen unidades de distintos cuerpos y ejércitos. Y lleva bastante tiempo. Cuando ya he hecho mi ronda de disparos artilleros y movimiento, hago una ronda de ataque de infantería. Y justo antes de darle al botón de realizar, tomo las capturas. En ese preciso momento, mi amada esposa exigió mi atención, e inadvertidamente ordené atacar antes de capturar imágenes).
En el frente de Lieja, detengo mi avance hacia Amberes. Los cañones de la fortaleza me apuntan amenazadores, y todavía hay dos brigadas de británicas, una francesa de reserva y, más atrás, otra francesa de guarnición, con artillería belga. No puedo envolverlas; atacarlas no vale la pena. Así es que traigo por tren un cuerpo de seguridad, que no sirve para combate, que las cubrirá para impedir que avancen; mi I Kav Korps, mi II cuerpo y mi III cuerpo de reserva se moverán hacia el sureoste, en la dirección de mi ataque principal.
Llevo a cabo un par de pequeños cercos: Uno, de belgas, cae una brigada de infantería y otra de caballería (círculo rojo). Otro, de una brigada francesa de reserva, muy debilitada, junto con un batallón de reserva y otro belga (círculo rojo también). Estos pequeños cercos van erosionando la capacidad de recuperación de los aliados.
Mi eje de avance principal es hacia el sureste, siguiendo la vía férrea. Allí fuerzo a retroceder a los franceses que se me oponen. Son unidades de guarnición de París: los franceses están enviando aquí todos los refuerzos que les llegan. No son fuertes, pero fatigan a mis soldados e impiden mi avance.
Si pensase que podría llegar a París, esto me pondría contento, porque significa que París estará desguarnecido de tropas de intantería. Pero París se halla fuera de mi alcance, por desgracia.
En Namur, he ampliado la cabeza de puente, pero todavía no puedo atacar el corazón de la fortaleza ni la fortificación restante, pues mis tropas están agotadas de la lucha de los días anteriores. Eso queda para el siguiente día al amanecer.

En el Mosa superior, mis tropas siguen cruzando y ampliando la cabeza de puente, hasta prácticamente dominar toda la otra orilla. Los británicos han preparado una línea defensiva que se apoya en Namur. Pero sin artillería, dudo que puedan mantenerla.
En Dinant, mis tropas siguen ampliando la cabeza de puente. En el Mosa, quedan cercadas dos divisiones, una inglesa y otra francesa de reserva. Una unidad mía de infantería avanza de forma imprudente para descolocar la artillería francesa. La razón de tal imprudencia es que el alto mando me ha comunicado que me va a retirar dos cuerpos de infantería próximamente, para enviarlos a Prusia oriental. Y esta brigada es una de las que se irá. Así pues, me permito correr el riesgo de que la cerquen, si así disloco la defensa francesa.
Los aliados están confusos ante la facilidad con que he conquistado Dinant, cuando ellos lo intentaron infructuosamente en la partida anterior. La respuesta es: artillería. Yo defendí Dinant con toda la artillería de mi 5ème. En cambio, ahora, solo se me opone un regimiento de artillería de cuerpo y la artillería pesada del 5ème. Poca cosa, dado que yo he concentrado allí siete regimientos de artillería de cuerpo y la artillería pesada del 2AOK. Y he lanzado contra Dinant a todo el segundo ejército. Dinant es, o mejor dicho, era, el punto clave de la defensa francesa en el Mosa superior.
(Nota histórica: Cuando el general Lanrezac, jefe del 5ème, supo que Dinant había caído, ordenó que su ejército se retirase, forzando así también la retirada de los ingleses y del 4ème. Esta maniobra salvó al 5ème de la destrucción y, a la postre, salvó Francia. Pero Lanrezac fue destituido por falta de espíritu combativo).

En el norte de Metz, mi avance se ralentiza. El 4ème está siendo forzado a retroceder, y está bastante dañado; pero no conseguiré destruirlo. El motivo: los cañones de Verdún. Cuando se coloquen bajo su protección, sería bastante estúpido atacar. Cerco dos brigadas de infantería francesa (círculo rojo) y las destruyo.
El plan ahora consiste en, con el XXI Korps y el I Bavarian Korps, del 6AOK, atacar de flanco a las unidades francesas que asedian Metz, mientras formo con los reservistas del 5AOK un frente estático y envío al resto del 5AOK por tren hacia Sedán, donde voy a romper el frente.

En el sur de Metz y Lorena, los franceses están intentando salvar su honor, atacando con todas sus fuerzas (parece que mi oponente no tenía muy claro dónde estaba Alsacia y dónde Lorena). Aquí sí ha concentrado su artillería. Pero yo he hecho lo mismo. Y para apoyar la defensa, además de la artillería pesada del 6AOK y de la artillería de cada cuerpo, he traído dos regimientos de artillería de cuerpo y la artillería pesada del 7AOK, que estaban en Alsacia.
Las oleadas de franceses son destrozadas por mis obuses pesados. Hay brigadas que se desintegran al atacar. Solo consiguen un pequeño avance; podría contraatacar, pues los franceses solo han logrado avanzar con caballería; pero no es un punto esencial y prefiero reservar fuerzas por el momento.
Cuando los franceses se detienen agotados, mi artillería pesada alarga el tiro y hace fuego de contrabatería (explosiones verdes).

Es hora de hacer recuento de bajas. Mis pérdidas de caballería han sido considerables: unos 800 escuadrones, me quedan 3.000. Es decir, un 25 % de bajas, aproximadamente. Solo recupero 30 escuadrones por turno (siempre a partir del turno 18, en todas las unidades), o sea, que dudo de que consiga llegar a tener el nivel inicial a lo largo de la partida. De todas maneras, las bajas de caballería han sido soportables.
Mis pérdidas de infantería también han sido fuertes: 7.000 pelotones, de un total actual de 45.500. Es decir, unas bajas aproximadas del 7,5 %. Totalmente soportables, para lo que era la Gran Guerra; además, confío en que ya habrá pasado lo peor: Lieja y Namur. Los reemplazos (a partir del turno 18, recordemos), son de 800 pelotones por día. En 10 turnos se pueden compensar las bajas sufridas. Perfecto.
En artillería, ingenieros, ametralladoras... las bajas han sido mínimas y se compensan con los refuerzos llegados.
Como inconvenientes: Van a mandarme a Prusia oriental a dos cuerpos de ejército, el XI y el Reserva de la Guardia, junto con tres o cuatro brigadas de caballería. He procurado que estos dos cuerpos lucharan duro, han sido los que han asaltado Dinant. Pero por desgracia no los he podido mandar a Namur, donde la lucha ha sido mucho más sangrienta.
Llegarán como refuerzos, en cambio, un par de cuerpos de seguridad, sin artillería, que solo me servirán para cercar Amberes hasta que decida si la asalto o no. Y unos cuerpos de reserva, desde los turnos 28 a 32: el XXII, XXIII, XXIV, XXVI y XXVII. Ya veré qué hago con ellos, según sea la situación.
El ejército francés está siendo duramente castigado. Pero tiene un as en la manga: el 6ème armée, que se está formando y que consta de seis cuerpos frescos y listos para la lucha. Comienzan a llegar desde el turno 28 al 35. Es un ejército temible, fue el ejército que venció a los alemanes en la batalla del Marne. Aparte de esto, a los franceses solo les queda por llegar el IV de guardias, 7 brigadas de infantería sin artillería que no me preocupan demasiado.
Los franceses todavía no han empleado su primer cuerpo de caballería, que se encuentra en la reserva, yo creo que por la zona de Sedán. Y, claro, están sus casi inconquistables fortalezas: Verdún, Toul, Epinal y Belfort. Aunque los franceses han mandado sus guarniciones a la batalla, sus inmensos cañones pueden frenar de lejos cualquier ofensiva alemana.
Los reemplazos franceses son mucho menores que los alemanes, sobre todo en infantería, que es lo que más se quema: 550 pelotones de infantería cada turno, por 800 los alemanes. De caballería, 50 escuadrones los franceses por 30 los alemanes (aquí los franceses tienen ventaja; pero he destruido bastantes brigadas de caballería ya desde los primeros turnos). De artillería, los franceses fabrican 15 cañones del 105 al día (son los que llevan los regimientos de artillería de cuerpo); eso significa que mi fuego contrabatería ha de ser fuerte y continuo para dañar su artillería, pues destruyo unos 20 cañones en cada disparo. Fabrica cañones del 120 como churros, 10 cada día, van con su artillería de ejército, eso significa que no puedo colapsarlos, pues solo destruyo dos o tres en cada disparo; pero en cambio solo fabrica un obús del 155 al día, que también van con su artillería de ejército. O sea, que puedo disminuir la potencia artillera de su artillería de ejército en casi 2/3 con mi fuego antibatería (el obús del 155 es doble efectivo que el cañón de 120). Cada brigada de infantería francesa lleva consigo 18 cañones del 75 (el famoso 75), y producen 47 al día. Las brigadas alemanas también están armadas con 18 cañones muy parecidos, aunque del 77, y producen 42 al día.
En resumen, el ejército francés no conseguirá recuperarse a tiempo si sigo presionando. Excepto en Alsacia, donde he detectado un par de cuerpos intactos que vigilan los Vosgos, en todas las demás partes ha perdido un cuarto de sus efectivos de infantería; su artillería de cuerpo está casi intacta, pero su artillería de ejército está tocada.
Su única esperanza el el 6ème de Galieni. Si lo emplea bien, tal vez se libre de la derrota.
La puntuación sigue dando un empate, gano solo por 72 puntos. Bajas: 153 VPs alemanes, 52 VPs franceses. Puntos por terreno (los franceses parten con ventaja al inicio): 637 alemanes por 666 franceses. O sea, que no solo hay que matar franceses, hay que conquistar Francia.
El tiempo es el otro aliado de los franceses.