24 de agosto de 1914. Frente occidental.
Los franceses paralizan su ataque y se quedan sin artillería para defender, por culpa de una confusión del mando.

Es un pequeño desastre y se corre un gran peligro.
Vamos a ver los mapas, tal como los vi cuando abrí el turno.
Los alemanes han ido tomando, por fin, posiciones ofensivas para tratar de cruzar el río Mosa entre Namur y Dinant.
En Lorena, Metz está a punto de caer, la guarnición ha sido forzada a retirarse y solo queda el fuerte. Acuden muchos refuerzos alemanes por tren, al menos tres cuerpos de ejército que detendrán mi ofensiva.
Y en Alsacia continúa mi avance, aunque dificultado por el terreno y por el hecho de que las vías de tren se están alejando cada vez más (los franceses, con su típica meticulosa planificación de las ofensivas, no prepararon unidades especiales para reparar las vías del tren, lo han de hacer los ingenieros y lo hacen despacio y mal).
Voy a explicar aquí cómo hago cada turno para entender lo que ha pasado:
En primer lugar, muevo todas mis unidades sin atacar con ninguna. A continuación, disparo con toda mi artillería que no se haya movido. Este disparo de artillería supone un 20 - 30 % del turno. Luego pongo la artillería atrincherada, para que defienda, y ataco con mi infantería. Normalmente una ronda de ataques de infantería, aunque a veces pueden ser dos.
En TOAoW tienes que tener cuidado, cada turno tiene 10 rondas máximo, aunque los escenarios tienen un límite de rondas: en los motorizados puede incluso llegarse al máximo (yo nunca lo he conseguido). Un ataque gasta como mínimo una ronda. Pero tiene que ser un ataque facilísimo en el que no se ofrezca resistencia.
Si mueves un 10% de tu capacidad de movimiento y luego realizas un ataque limitado en el que gastas el 20 % de las rondas, consumes el 30% del turno. Veámoslo en imágenes, de un escenario de Normandía, IIGM.
Atacamos al batallón alemán con los comandos, que han iniciado el turno a su lado. El gasto teórico de tiempo es del 10% (un cuadradito gris en la imagen)
Si atacamos con el batallón acorazado, que ha movido un 10% de su capacidad, entonces veremos que se usa un 20% del turno (sin importar si colaboran o no los comandos).
Pero si atacamos con la infantería que está junto al batallón acorazado, que ha movido más de la mitad de su capacidad, gastaremos el 80% del turno. Probablemente solo habrá una ronda
Y un solo ataque mal planeado, de los montones que hay, puede hacernos terminar prematuramente el turno. Sin contar con que a veces se producen imponderables: si el enemigo resiste, un ataque sin importar bajas puede costar tres, cuatro o cinco rondas de combate, en vez de una. Por eso hay que tener mucho cuidado al planear las cosas.
Bueno, pues todo este rollo viene a cuenta de que he movido sin atacar, he disparado mi artillería... y se me ha terminado el turno. ¿Qué ha pasado? No lo sé. Tal vez he movido una artillería y luego he disparado. Otra cosa no me explico.
Resultados:
1.-Tengo toda mi artillería en posición ofensiva. En las zonas donde ataco no importa mucho, pero en todo mi flanco izquierdo mi infantería está sin apoyo artillero. Según la ley de Murphy, será ahora cuando mi oponente ataque, después de pasarse 23 turnos tocándose los cataplines. Lieja y Namur están con las piernas abiertas, literalmente.
2.-En la zona de Alsacia-Lorena, al no seguir presionando, le concedo tiempo para que sus unidades en retirada se reabastezcan, descansen y se atrincheren. Maravilloso. Aparte de que así mi oponente tendrá tiempo de desplegar sus refuerzos.
Moraleja: No te confíes cuando vayas ganando, o la cagarás.
Moraleja 2: Si tienes una telenovela en casa y llevas noches sin dormir bien, jugar a TOAoW te distrae, pero no lo harás muy bien.
Moraleja 3: Cuando te suceda algo así, no tires el ordenador al suelo, ni lo aporrees. Tampoco hagas trampas volviendo a jugar el turno, está feo (y a tu oponente le llegará un mensaje de que lo has hecho). Respira hondo. Envía pronto el turno por correo, para evitar tentaciones. Maldice a quien inventó el TOAoW. Asume tu error. Haz autocrítica. Llora como una mujer lo que no has sabido planear como un hombre. Y luego prepárate para seguir combatiendo, suceda lo que suceda.