La idea que tengo es hacer un Dunkerque norteamericano en el año 1944, semanas después de un día D fracasado, pero a mucha menor escala.
Las batallas serían con pocas tropas (máximo una compañía) con una duración de una media hora entre combate y combate. Pasado ese tiempo, reflejaría los avances de ambos bandos sobre el mapa, haría un recuento superficial de las bajas de ambos bandos, intentaría simular los daños sobre el terreno y si el Estado Mayor lo estima oportuno, se seguiría participando en el mismo mapa para la siguiente batalla.
El objetivo aliado sería reembarcar al mayor número posible de tropas hacia Inglaterra y el objetivo alemán sería tomar "Dunkerque" en el menor número de días y haciendo la mayor cantidad de bajas al enemigo.
No hay reglas que leerse, ni manuales. Con ello intento simular que los comandantes sobre el terreno no disponen de toda la información sobre la batalla. Que se guien por el instinto y por mis indicaciones (yo seré los Estados Mayores de ambos jugadores) y las decisiones que tengan que tomar (utilizar la aviación para hundir buques enemigos o apoyar los ataques terrestres, abrir o no abrir diques para ralentizar a los alemanes, etc) se circunscriban a aspectos más prácticos y que, como ocurre habitualmente, se puedan trastocar porque Churchill o Hitler hayan decidido tomar cartas en el asunto.
Se podrá pasar de un mapa a otro controlando algunas zonas que aparecen sobre cada mapa:

El aleman ataca al principio desde las flechas rojas situadas abajo.
Para explicar el tema de cómo pasar de un mapa a otro lo haré con el siguiente ejemplo. Jugando la primera batalla, el aleman consigue infiltrarse y controlar al final de la batalla la "bandera" A superior de ese mismo mapa, automáticamente pasaria al siguiente mapa superior, donde iniciaría el siguiente turno de batallas.
Analogamente, si en vez de tomar la bandera A, tomase y conservase al final del turno la bandera B, podría aparecer en el siguiente turno de batallas por dos zonas del mapa central inferior.
Es parecido al sistema del Close Combat, para que os hagais una idea.
Tengo algunos mapas ya hechos y se podría empezar en breve.
Resumiendo:
1.-Olvidense de las batallas igualadas y monótonas (tu atacas, yo defiendo, sé las tropas que tienes y sabes lo que tengo). Se amplia el abanico dependiendo de las órdenes de sus superiores: incursiones, golpes de mano, reconocimiento de tropas enemigas. En algunos mapas, el control de ciertas zonas permitiria ciertos bonus (por ejemplo, si en uno de los mapas hay una colina que controla un aeropuerto, quien controle esa colina tendrá un bonus a la hora de contar con mayor aviacion con la que hostigar los convoyes aliados o cazas alemanes), amén de obtener en todos los mapas mayores puntos para poder gastarlos en refuerzos o apoyo artillero.
2.-Háganse a la idea de que las batallas, presumiblemente serán largas. Es raro que alguno de los dos bandos consiga tomar un mapa en la primera media hora de combates. Controlen sus bajas porque cada soldado cuenta y la sangre derramada no será facilmente reemplazada.
3.-Cada comandante estará representado en cada batalla por un "muñequito". Si ese muñequito muere o es herido, el comandante será eliminado o recibirá penalizaciones de diverso tipo.
4.-Si recibe una orden de Hitler o Churchill o de sus Estados Mayores podrá discutirla o protestarla (y si es bueno y le pilla al líder de buenas su punto de vista será tenido en cuenta), pero si la obvia atengase a las consecuencias. En general, ya saben ustedes que los mandamases odían dar su brazo a torcer, así que prepáranse para recibir órdenes sin sentido. Recuerden que las estrellas y los entorchados en las hombreras otorgan la infabilibilidad cuasi absoluta y que vistos desde allí arriba, ustedes son alfileres y hormigas que se mueven sobre impolutos tableros. Mentalícense para tomar búnkeres armados con mondadientes y chicle, si es necesario. Luego no me vengan con que si el ratio a favor del atacante 2 a 1, que si barreras de artilleria, que si las batallas son un puñetero rollo y me quiero retirar. Esto es la guerra, señores y Westpoint y sus viejos y teóricos profesores se quedaron al otro lado del Atlántico, a miles de kilómetros a retaguardia.
5.-Intentaré novelar, en la medida de lo posible y la disponibilidad de tiempo que tenga, toda la campaña para darle ese toque rolero que tanto mola y que hace que las pausas entre batalla y batalla se hagan más llevaderas.
¿Quien se apuntaría? Necesito al menos cuatro jugadores aliados (uno de ellos estaría al mando) y un jugador alemán.