Bueno, esto no es del todo exacto. Realmente el cambio es fundamental desde el CMX1 (el motor antiguo, que todos conocemos tan bien).
Con el motor antiguo todos los cálculos y la resolución del minuto siguiente de juego se hacía con el tiempo parado, y lo que veíamos después era un "video" de ese minuto.
En el nuevo motor, todos los cálculos de la interacción de las unidades, órdenes, etc. se realizan en tiempo real. Battlefront argumenta que ahora el hardware si permite hacer esto. Por tanto, el modo de juego en tiempo real será el modo natural (desde el punto de vista del funcionamiento del motor, no de nuestros gustos) de juego. Por encima de eso tendremos el sistema Wego tal como lo conocemos ahora. Por tanto no perdemos nada.
La primera vez que Steve contó esto yo no me sentí especialmente emocionado, porque aunque antes me gustaban los RTS bastante, ahora el Wego me atrae más.
Pero es cierto que enseguida ví ciertas ventajas a tenerlo disponible. Por ejemplo, jugar una batalla pequeña. Por ejemplo, un enfrentamiento de 1 sección contra otra sección con 1 MG y 1 mortero. Quizá ahora en frío no suena muy bien, pero puede que para un enfrentamiento corto pueda tener cierta emoción. En todo caso siempre nos queda el Wego ¿no?
Pero Steve ha comentado algo en lo que yo no había caído inicialmente. El juego cooperativo. Esta modalidad de juego, que no estará disponible en el primer título (pero seguramente si para el de Normandía 44), permitirá enfrentamientos de al menos 2 vs 2 jugadores humanos (esperemos que más).
El juego cooperativo podría dar luegar a grandes batallas, con cada jugador manejando 3 compañias para dar enfrentamientos épicos.
¿Pero y en el otro extremo? Imaginad jugadores en equipo, conectados con un software de voz, tipo RogerWilco, en tiempo real, cada uno manejando a una sección, en una batalla reducida, pero rápida, dinámica, y vibrante, donde contara mucho menos dar una microinstrucción cada unidad que la velocidad de reacción y la difícil coordinación de 2 o más jugadores para derrotar al enemigo.
Aunque el escenario de Siria no logre atraernos, mirando al futuro, el segundo juego, este ya de vuelta en la WWII, puede aportarnos esta nueva forma de jugar unos contra otros.

¿Cómo lo véis?