Tal y como estaba, era un aeropuerto flotante y poca cosa más, aunque es lo que tienen los portaaviones
Estuve caracterizándolo para el Global Conflict Blue y entonces me di cuenta que era renovarse o morir, quizás algun país con territorios y aspiraciones oceánicas como Chile hubiera podido hacerse cargo del coste de la compra y de equiparlo con tecnología actual, parcialmente en España, y todos hubiéramos salido ganando.
Eso sí, la compra de esta nave hubiera sido un polvorín político en los paises vecinos y seguramente España hubiera recibido su parte
