Como resultado de lo anterior, el mapa operacional queda así:
El 22º Ejército tiene que abandonar el hexágono en disputa y en su retirada no puede pasar a ZdC de una unidad enemiga. Para los que sepáis como funciona un wargame de tablero, sabréis que la Zona de Control (ZdC) de cada unidad son los seis hexágonos que la rodean, hasta donde se traslada su potencia de fuego.
Pues bien, el 22º se retira hacia el oeste, porque no puede hacerlo hacia ningún otro hexágono, dado que todos están bajo ZdC del 16º o 23º Korps, quedando el turno que viene separado de sus líneas e insuministrado. Mi problema es que, aunque yo puedo elegir ocupar dicho hexágono abandonado, es preferible no hacerlo. ¿Por qué? Porque sólo puedo avanzar con el 23º, dado que el 16º fue derrotado en el asalto. Así las cosas, si os fijáis en el mapa, si desplazo el 23º hacia el hexágono en litigio, dejo despejado el flanco izquierdo de Rzhev, donde con toda seguridad en el turno que viene, Rober colocará su 4º Shock Army, cruzando el río y planteándome un serio dilema: primero, amenazando Rzhev más directamente, y segundo, amenazando al 16º y al 23º con quedar copados al norte y casi cercados.
Por eso el cabroncete de Rober asignó casi todas las unidades al frente con el 16º Kps (BAT1-a). Lo ideal para mí hubiera sido poder avanzar con el 16º, porque hubiera taponado la brecha:
Además, al norte hubiera quedado ese lago que impide el cruce de hexágono por ese lado. Hubiera podido formar una línea con los tres Kps.
Así pues, no he ganado nada. Al turno que viene, Rober meterá el 4ºShock Army en el mismo hexágono en que estaba el 22º, enlazará con dicho Ejército evitando que quede insuministrado más de un turno, y consolidando definitivamente el cruce del rio al norte de Melidovo.
Saludos.
P.D. Los numerales rojos son los indicadores de la lista de bajas.