Mes de septiembre. 86 A.C.
Batalla en
Capua, parece que el enemigo sigue en su postura ofensiva y al estar yo a la defensiva se produce un encontronazo que acaba en victoria pírrica.
Más bajas en cohortes romanas para el enemigo aunque mi caballería sufre. Esta batalla está bien porque desgasta al enemigo y si tengo la suerte de que llegue
Cayo Mario “Junior” tal como le ordené antes de que mi rival salga de
Capua…
¡Lo hace! El hijo de
Cayo Mario llega a tiempo para dar combate y ocurre esto.
Terrible derrota para los Optimates con más de 6.000 prisioneros capturados. Son muchos elementos de cohorte perdidos, casi el equivalente a una legión entera a costa sólo de caballería Popular, como en la anterior batalla.
Esta es la situación.
La victoria ha sido total, el enemigo se refugia en
Neapolis. No sé si hay 2 o 3 legiones enemigas allí después de estas derrotas, pero creo que al menos una de ellas ha debido de sufrir muchísimo.
Fijaros el ritmo de recuperación de bajas de
Cinna en
Roma. Es brutal aunque no todas son para su ejército, algunas van a parar al que hay en
Sicilia. Pero esto sirve de ejemplo para ver la importancia de suministrar bien el pool de reemplazos y tener el dinero suficiente para poder seguir comprando reservas.
El otro ejército Optimates sigue asediando
Tarentum, sin éxito. Pero ahora hay que ir sobre seguro, es fundamental evitar que mi rival se recupere en
Neapolis, hay que acecharlo y no darle cuartel. Es ahora o nunca.
Estas victorias traen sus frutos, claramente.
La MN se dispara.
Puntuación, por las nubes.
El jugador Optimates está sufriendo en todas partes, esto tiene pinta de que acabará muy mal para él.
Más eventos que afectan al jugador póntico que no creo que se sienta muy preocupado.
Un vistazo a esta zona del mapa, al norte del
Mar Negro.
Esto me queda muy lejos, no creo que afecte en demasía al jugador póntico que debe estar más preocupado en otros temas como reconquistar Grecia y machacar a los Optimates. Los sármatas están ahí así como los escitas, con sus arqueros a caballo. Qué divertido debe ser enfrentarse a estos enemigos.
Vayamos a
Hispania, donde no ha habido combates. Turno relativamente tranquilo.
El juego del gato y el ratón aquí no me está reportando nada. Sólo hago que ir de cabeza y es momento de plantearse seriamente las cosas. Como dije en anteriores reportes decidí construir dos carros de suministros en
Carthago Nova para mi futura campaña ofensiva en territorio lusitano.
Servilo se quedará a la espera de que los carros estén operativos para luego fusionarlos con su ejército mientras el otro ejército romano avanza hacia
Italica, ya que los lusitanos se han marchado abandonando el asedio (los lusitanos aparecen y desaparecen rápidamente en
Hispania, supongo que por los bajos niveles de detección que tengo, por el terreno hispano o bien porque los lusitanos son como tropas guerrilleras y se esconden con facilidad - tienen caballería e infantería hostigadora). Da la sensación que con la llegada del invierno la IA ha decidido recular las tropas y llevarlas a territorio seguro. ¿Quizás la IA sabe algo que yo no sé? ¿Me espera un duro invierno en Hispania?
Puntuación.
Curiosamente el jugador Optimates se recupera en PODER respecto al turno anterior a pesar de su grave derrota en
Capua, vete a saber si por eventos o refuerzos recién reclutados. La moral suya, eso sí, está a niveles bajísimos pero relativamente lejos todavía del 25 mínimo.
Finalmente os dejo un análisis de los planes previstos para Italia. Pongo mis intenciones para el siguiente turno.
Como veis voy a intentar perseguir a las legiones Optimates derrotadas este turno en
Capua pero no es suficiente. Quiero conquistar la gran ciudad objetivo de
Neapolis, que es muy rica, tiene un gran puerto y aporta reemplazos de barcos aleatoriamente gracias a su puerto comercial y astilleros. Es por eso que voy a mover una Flota para bloquear el puerto y acelerar el proceso de asedio ya que la ciudad cuenta con una fortificación de nivel 3, de las más altas del escenario. Al mando de la flota está el Almirante
Gneo Granio/b] que es un hombre muy competente y tiene una habilidad que le permite detectar al enemigo con antelación ganando iniciativa. Tiene a su disposición 3 unidades de combate naval que incluyen buques de guerra pesados y ligeros. Es una flota apañada pero que es insuficiente para enfrentarse a la mejor flota Optimates y Póntica si llegara el caso, aunque no se detecta ninguna en el puerto de Neapolis o alrededores.
Nada hace presagiar que estamos a punto de vivir la 1ª gran batalla naval de la Guerra Civil.