15 de agosto de 1914. Turno 14. Falta un día para que termine, según lo previsto, la movilización de los ejércitos primero, segundo, tercero y cuarto. El alto mando alemán toma una difícil pero necesaria decisión:
SE CANCELA EL PLAN SCHLIEFFEN
Veamos la situación en Lieja, que nos ha llevado a replantear toda nuestra estrategia:
El ejército del Mosa ha sido desbandado, tras cumplir con su difícil misión de conquistar la fortaleza de Lieja (y de paso, ha derrotado al ejército belga). Ahora cubre la línea, por el momento, el II cuerpo de caballería, recién llegado de Alemania, hasta que lleguen las avanzadillas del primer ejército.
Una brigada de caballería, del primer cuerpo de caballería, avanza para abrir el vado, derrotando a un par de unidades de guarnición francesas (gracias al apoyo de mi exahusta artillería).
Observamos que más al sur algunas unidades francesas han cruzado el Mosa, derrotando a mis avanzadillas de infantería ligera; pero si el enemigo quiere pelear a mi lado del río, me parece muy bien, mientras no penetre lo suficiente como para destruirme más puentes (que custodia mi caballería). Esto son escaramuzas, no tiene importancia.
El problema está en Lieja. Además del ejército belga, muy dañado, los franceses han vaciado sus fortalezas de guarniciones, han enviado parte del primer ejército de reserva de Alsacia, hay caballería del ejército de París... Y están llegando los ingleses por tren (círculo rojo). Solo veo un par de brigadas, pero habrá muchas más, seguro, mi reconocimiento es muy pobre.
O sea, me van a obligar a luchar en un frente estrecho, donde mi superioridad numérica no servirá de mucho. Claro que los machacaré gracias a mi artillería, ese batiburrillo de tropas aliadas carece prácticamente de artillería, salvo una unidad belga de corto alcance. Pero si intento cumplir el plan Schlieffen me enzarzaré en una guerra de trincheras en Lieja, donde avanzaré muy poco a poco. El Plan Schlieffen dependía de lograr un rápido avance por Bélgica, entre el Mosa y Bruselas.
Lo más curioso de todo es que, históricamente, los franceses conocían el plan Schlieffen y podrían haberlo neutralizado de igual manera. El Deuxième Bureau se lo había comprado a un oficial alemán del Estado Mayor acosado por deudas del juego. Y, pásmense, señores, el mismo Schlieffen, ya jubilado, se había enfadado porque sus sucesores habían realizado algunos cambios menores en su plan, ¡y había escrito en los periódicos protestando y explicando por qué no se debía cambiar nada.
Bueno, a lo práctico. Los franceses conocen ahora el plan Schlieffen y están actuando para neutralizarlo. Ni home rules, ni gaitas. Hay que ser flexible y cambiar los planes si la situación cambia.
Mi instinto de maniobrar me pide algo un poco más elegante y eficaz.
El primer ejército alemán, el más poderoso de todos, se dividirá en varias ramas: Su objetivo principal será conquistar Namur, separando al BEF del quinto ejército francés de Lanrezac. Tratará de envolver a los británicos y a los defensores del frente de Lieja, apartándolos de su base de Amberes. O sea, cruzar el Mosa más arriba de Lieja, avanzar más o menos hasta donde ahora vemos a los ingleses y luego girar hacia el norte, hacia Holanda. Es una maniobra difícil, porque los cañones de Amberes nos mantendrán a distancia, hay muy poco espacio.
El segundo ejército alemán, que antes debía conquistar Namur, ahora bajará hacia Dinant. Su misión, fijar al quinto ejército francés en el Mosa.
El tercer ejército alemán, que antes debía conquistar Dinant, ahora tratará de introducirse entre el quinto y el cuarto ejércitos franceses. Es una misión difícil, pues no hay buenas carreteras.
El cuarto ejército alemán, desbordará el flanco del cuarto ejército francés. El quinto ejército alemán, avanzará para fijar al cuarto ejército francés. Y el sexto ejército alemán defenderá Metz, pero también amenazará el flanco derecho del cuarto ejército francés, separándolo del tercer ejército francés, con base en Verdún.
Es decir, el plan consiste en separar, envolver y destruir los distintos ejércitos aliados del flanco izquierdo aliado: El BEF en Bélgica, el quinto ejército francés en el Mosa, y el cuarto ejército francés al norte de Metz.
A ver si sale bien, porque todo se mueve a una velocidad lentísima.
En la zona del norte de Metz, el cuarto ejército francés se ha olido la tostada y se ha detenido. Vaya por Dios. Bueno, haremos lo que podamos. Por el momento, mi superioridad artillera lo hostiga desde Metz.
